BERLÍN, 23 Abr. (DPA/EP) -
La canciller alemana, Angela Merkel, ha asegurado este viernes ante una comisión parlamentaria que se encuentra investigando el escándalo entorno a la empresa Wirecard que no le dio un trato preferencial a la compañía durante un viaje a China en 2019.
La mandataria, que ha defendido que cuando habló del proveedor de servicios de pago digital durante dicho viaje no había indicios de "irregularidades", ha indicado que los objetivos de Wirecard "encajaban" entonces con los del Gobierno, por lo que era natural que la canciller promocionara un negocio alemán en el marco de conversaciones bilaterales.
"A pesar de las publicaciones de prensa en aquel momento no había motivos para asumir que se estuvieran produciendo graves irregularidades en Wirecard", ha dicho Merkel sobre una empresa que quebró en 2020 tras destaparse un fraude multimillonario.
Así, Merkel ha confirmado que durante su visita a China en septiembre de 2019 se reunió con Karl Theodor zu Guttenberg, un lobista que trabajaba para la citada compañía y exministro de Defensa y Economía.
Wirecard, que se encontraba a la cabeza del DAX, admitió en junio de 2020 que unos 1,9 billones de euros en bienes no existían realmente. Tras descubrirse el escándalo, Wirecard fue expulsada del selectivo bursátil, lo que provocó una caída de las acciones y la bancarrota de la empresa, además de la detención de sus directores ejecutivos.
La Fiscalía cree que Wirecard venía planeando el fraude al menos desde 2015. El caso ha puesto en tela de juicio la efectividad de la supervisión de entidades financieras en la mayor economía de Europa.