BERLÍN, 29 May. (Reuters/EP) -
La canciller de Alemania, Angela Merkel, se ha descrito este lunes como una "convencida" defensora de las relaciones transatlánticas, aunque ha insistido en que ya no es momento de "confiar completamente" en otros países, en una alusión en la que muchos han visto reflejado al presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Un día después de dejar entrever sus diferencias con Trump, tras unos días intensos con motivo de la reunión de la OTAN y del G-7, Merkel ha insistido durante un discurso en Berlín en que los días en los que Europa puede depender completamente de otros aliados han "terminado hasta un cierto punto", algo que ha comprobado "en los últimos días".
Aunque la canciller ha dejado claro que, "por supuesto", Berlín y Washington seguirán siendo aliados, ha reconocido la frustración generalizada por la política de Trump en materia climática y ha instado a sus socios europeos a "tomar el destino en sus propias manos. "Quedó claro en el G-7, cuando no hubo acuerdo con Estados Unidos, lo largo y complicado que sería el camino", ha dicho durante un acto centrado en desarrollo sostenible.
Merkel también se ha referido indirectamente a Trump al advertir de que "quienes se pongan anteojeras nacionales y no tengan ojos para el mundo" se arriesgan a perder relevancia.
El portavoz de la canciller, Steffen Seibert, ha alegado que, precisamente porque Merkel considera "muy importantes" las relaciones con Estados Unidos, quiere hablar "sinceramente" de las "diferencias". En este sentido, ha declarado que estos lazos siguen siendo "un firme pilar" de la política exterior y de seguridad de Alemania.
El coordinador del Gobierno alemán para las relaciones transatlánticas, Juergen Hardt, ha recriminado a la Administración norteamericana la "incertidumbre" y las "contradicciones" en las que ha incurrido Trump, apenas cuatro meses después de que éste tomase las riendas de la Casa Blanca. Esta posición, ha añadido, "debilita a Estados unidos e irrita a sus socios".