BERLÍN, 15 Sep. (DPA/EP) -
La canciller de Alemania, Angela Merkel, ha dado este viernes su respaldo público a la reforma laboral que quiere implantar el presidente de Francia, Emmanuel Macron, al término de una reunión con el primer ministro galo, Édouard Philippe, en Berlín.
"Apoyamos los esfuerzos reformistas de Francia y al Gobierno le deseo éxito y fuerza para la reforma laboral que está en una fase decisiva", ha dicho Merkel, la misma semana en la que cientos de miles de personas han salido a las calles de varias ciudades francesas para protestar contra los cambios.
Merkel ha admitido que "estas reformas no siempre son fáciles de aplicar" y ha advertido, "por propia experiencia", de que los efectos no tienen por qué llegar de forma "inminente", ya que "necesitan su tiempo".
La canciller alemana ha asegurado que no quiere inmiscuirse en la política francesa, pero ha recordado que la reforma laboral fue precisamente una de las grandes promesas de Macron en campaña y que el líder de la República En Marcha logró en las urnas una "fuerte legitimación".
Philippe, en una entrevista al 'Frankfurter Allgemeinen Zeitung', ha defendido la reforma como una herramienta clave para "recuperar la credibilidad en la Unión Europea". Para los sindicatos, en cambio, representa un abaratamiento del despido y sólo tiene en cuenta los intereses de las empresas, que tendrán más margen para imponer sus condiciones laborales.