YEDÁ, 30 Abr. (DPA/EP) -
La canciller de Alemania, Angela Merkel, comienza este domingo una gira de dos días por Arabia Saudí y Emiratos Árabes con la vista puesta en la actual guerra en Yemen sin desdeñar cuestiones sobre la situación de los derechos humanos, los de las mujeres concretamente, que planteará a los diversos líderes con los que se reunirá durante su gira.
Gira que comenzará en la ciudad portuaria saudí de Yedá, donde conversará con sus interlocutores, el rey Salman bin Abdulaziz Al Saud y el viceprimer ministro del país, el príncipe Mohammed bin Nayf, sobre la posiblidad de encontrar una solución política a la brutal guerra civil en Yemen, donde Arabia Saudí lidera una campaña internacional contra los rebeldes huthis, respaldados por su némesis regional, Irán.
No se espera que Merkel o los saudíes discutan proyectos de armamento pero sí un breve repaso a las relaciones comerciales entre ambos países. En este sentido, la canciller podría pedir al monarca una reducción arancelaria, según fuentes de Berlín a la agencia Reuters.
El tema más espinoso será sin embargo uno que Merkel tiene intención de abordar sin cortapisas: la situación de los derechos humanos en un país donde las mujeres tienen prohibido conducir. En el centro se encuentra la petición que Merkel ha recibido de la esposa del bloguero encarcelado Raif Badawi, y en la que le solicita la liberación del escritor.
Tras su visita a Arabia Saudí, Merkel viajará a Emiratos Árabes para entrevistarse con el príncipe Mohammed bin Zayed Al Nahyan antes de dirigirse a la ciudad rusa de Sochi, donde se verá las caras el próximo martes con el presidente ruso, Vladimir Putin.
Toda esta gira tiene como objetivo adicional calentar motores con vistas a la cumbre de los estados del G-20 que Merkel presidirá el próximo mes de julio en la ciudad alemana de Hamburgo y que contará con la presencia de los líderes saudíes y del presidente Putin.