MADRID, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los gobiernos de México y de Argentina han llamado a consultas a sus embajadores en Nicaragua ante las "preocupantes" detenciones de políticos de la oposición, cinco de ellos precandidatos a las elecciones presidenciales del 7 de noviembre en las que el presidente Daniel Ortega opta a la reelección.
Buenos Aires y México achacan la medida a las "preocupantes acciones políticas-legales realizadas por el Gobierno nicaragüense en los últimos días que han puesto en riesgo la integridad y libertad de diversas figuras de la oposición (incluidos precandidatos presidenciales), activistas y empresarios nicaragüenses".
Así, este lunes han emitido sendas órdenes para que los embajadores mexicano, Gustavo Alonso Cabrera Rodríguez, y argentino, Mateo Daniel Capitanich, regresen a sus capitales para consultas.
"Argentina y México se mantendrán atentos a la evolución de los acontecimientos relacionados con la hermana República de Nicaragua y seguirán promoviendo inequívocamente el pleno respeto y promoción de los Derechos Humanos, las libertades civiles, políticas y de expresión de toda persona, con independencia de su nacionalidad y/o profesión", explican los dos países en un comunicado conjunto en el que informan de la llamada a consultas.
Asimismo, manifiestan su "disposición plena para colaborar constructivamente en la promoción del diálogo" para que se supere "esta situación por la vía pacífica, respetando la división de poderes, el respeto a las minorías, las garantías constitucionales y, en general, el pleno respeto al estado de Derecho y todos los derechos humanos".
El domingo, la Policía detuvo al periodista y político opositor Miguel Mora, con lo que ya son cinco los precandidatos electorales arrestados en las últimas semanas en el país centroamericano. Las autoridades atribuyen a Mora todo tipo de actos subversivos, acusándole de incitar a la injerencia extranjera en asuntos internos y poner en riesgo la soberanía y la autodeterminación de Nicaragua.
Además de Mora, también ha sido arrestados en las últimas semanas más de una decena de políticos opositores, entre ellos los también precandidatos Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Juan Sebastián Chamorro y Félix Madariaga. Esta ola represiva ha recibido críticas a nivel internacional, también desde España y la Unión Europea, pero el Gobierno de Ortega ha negado persecución con fines políticos.