MADRID, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores de México, Marcelo Ebrard, ha planteado este sábado la posibilidad de que su país acoja una mesa de negociación entre el Gobierno de Venezuela y la oposición del país caribeño.
"No puedo confirmar ninguno de esos datos, porque puedo poner en peligro procesos que son muy complejos, pero lo que sí puedo decirte es que la posición de México desde el encuentro aquel en Montevideo, ya hace mucho tiempo, hablo del 2019, fue: hay que hacer una negociación entre ambas partes y tratar de buscar acuerdos. Esa ha sido la postura de México todo el tiempo", ha afirmado Ebrard al ser interrogado en rueda de prensa por si México podría acoger las negociaciones.
"Todo lo que podamos hacer para contribuir a que se dé un diálogo y se encuentren acuerdos entre los venezolanos lo haremos", ha añadido el máximo responsable diplomático mexicano.
Ebrard ha recordado que "no sería la primera vez que México es sede, México ha sido sede de muy diversas conversaciones" y de hecho ha destacado que hay contactos con Noruega. "Estamos cerca de Noruega, tenemos muchas afinidades" y "estamos en pro de ese tipo de acuerdos, solución pacífica, pero no podría, no tengo autorización ahorita para compartirles detalles sobre eso".
A la pregunta concreta de si "hay algún planteamiento de que México sea sede", Ebrard ha contestado "bueno, siempre ha estado considerado, pero no tengo confirmación todavía".
El líder opositor venezolano Juan Guaidó ha planteado un proceso de negociación con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que cuente con participación de las "potencias" internacionales, para lograr la celebración de elecciones "libres y justas" y atajar la crisis política en la que está inmersa la nación caribeña.
La negociación con Maduro, a la que se había negado hasta ahora, se enmarca en una iniciativa denominada Acuerdo de Salvación Nacional y, además de la celebración de elecciones presidenciales, parlamentarias, regionales y municipales con observación y respaldo internacional, también pretende la entrada "masiva" de ayuda humanitaria y vacunas contra la COVID-19.