GEVGELIJA (MACEDONIA), 22 (Reuters/EP)
Miles de inmigrantes y refugiados han logrado romper el cordón policial que les impedía cruzar a la localidad macedonia de Gevgelija, en la frontera con Grecia, y han entrado a través de una zona de campos de cultivo, según ha informado un corresponsal de Reuters. La Policía ha intentado sin éxito impedir el paso utilizando granadas aturdidoras.
Los inmigrantes se han dispersado en la ciudad de Gevgelija, a la espera de conseguir transporte para desplazarse hacia Serbia. La Policía ha conseguido retomar el control de la situación con la colaboración del Ejército, según ha informado la agencia de noticias macedonia MIA.
"En esta Europa, los animales están durmiendo en camas y nosotros dormimos bajo la lluvia", denunciaba una joven siria de 23 años, Fátima Hamido, una de las personas que ha logrado cruzar la frontera desde Grecia. "Estuve cuatro días bajo la lluvia, congelada, sin nada para comer", se ha lamentado.
Mientras, continúan llegando autobuses con inmigrantes desde el sur de Grecia, que permite el paso de inmigrantes pese a las protestas de Macedonia. "Estamos solos en la tarea de garantizar la seguridad en la frontera", ha afirmado un portavoz del Ministerio del Interior macedonio, Ivo Kotevski, en declaraciones a MIA.
"Anunciamos que seguiremos permitiendo la entrada selectiva a un número limitado de inmigrantes en cifras que puedan ser tratadas de forma humana y trasladadas desde nuestro lado de la frontera", ha destacado. Así, los trenes continúan trasladando a los inmigrantes que logran cruzar hacia la frontera con Serbia. Kotevski ha destacado que ningún país europeo se ha ofrecido para acoger a los inmigrantes y refugiados procedentes de Grecia.
"Instamos al Gobierno (de Macedonia) a iniciar la apertura de la frontera nuevamente y priorizar a los más vulnerables, como las mujeres, los niños y las personas enfermas", ha apelado este sábado una funcionaria del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Alexandra Krause.
"Hay unas 3.000 personas aquí y las cifras están creciendo", ha indicado Krause en declaraciones a Reuters. "Las personas están exhaustas. Ha llovido toda la noche y no tienen techo" donde resguardarse, ha advertido.