MADRID 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
Miles de personas se han concentrado este jueves frente al Parlamento de Albania para pedir la dimisión del primer ministro, Edi Rama, al considerar que miembros de su gabinete están involucrados en casos de crimen organizado y corrupción.
Varios manifestantes han quemado neumáticos y han lanzado cócteles molotov contra los agentes en medio de un amplio dispositivo policial durante una jornada de protestas convocada por partidarios del opositor Partido Democrático, liderado por el conservador Sali Berisha, que se encuentra en arresto domiciliario por corrupción.
Durante la concentración, ha habido momentos de tensión cuando un grupo de manifestantes ha intentado romper el cordón policial, si bien los agentes han cerrado filas para impedir el paso de la multitud hacia el Parlamento, según el portal de noticias Panorama.
La manifestación se produce después de que Rama se haya reunido en la víspera con la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, para tratar el acuerdo bilateral alcanzado que permitirá la apertura de centros de recepción de migrantes en territorio albanés.
El polémico acuerdo permite crear un centro de tramitación en el puerto de Shengjin, además de dos centros de acogida para solicitantes de asilo, con 880 y 144 plazas, respectivamente. Dichos centros estarán ubicados en el municipio de Gjader.
Las protestas han ido en aumento además desde que la cadena de televisión RAI 3 publicase un vídeo en el que se escucha al ex viceprimer ministro Arben Ahmetaj, investigado por corrupción y lavado de dinero --y quien fuera mano derecha de Rama-- hablar sobre negocios ilícitos dentro del sector de la construcción.
En respuesta, Rama acusó directamente a los medios italianos de lanzar "fango" contra Albania para desprestigiar el acuerdo migratorio. "Ayudamos a Italia de corazón, estamos orgullosos de ayudar", ha declarado, en un intercambio de buenas palabras entre los dos líderes, según informa la cadena RAI.
Berisha fue puesto bajo arresto domiciliario en diciembre de 2023 por acusaciones que lo relacionaban conactos de corrupción cometidos durante su etapa como primer ministro, ocasión en la que, según la Fiscalía, abusó de su poder, si bien negó dichas acusaciones.