BUDAPEST 17 Dic. (Reuters/EP) -
Miles de personas se han manifestado este martes en la capital de Hungría, Budapest, contra el incremento de los impuestos y la corrupción, en una nueva muestra del creciente descontento con las políticas del Gobierno del primer ministro, Viktor Orban.
Los manifestantes se han concentrado frente al Ministerio de Economía para criticar el debilitamiento de la democracia, las reformas educativas y las políticas económicas, argumentando que las mismas están perjudicando a los más pobres.
Orban ha tenido que dar marcha atrás en las últimas semanas en su plan para tarifar el uso de Internet, lo que provocó protestas masivas, y ha protagonizado un cruce de acusaciones con el Gobierno de Estados Unidos sobre la presunta corrupción de varios funcionarios de su Ejecutivo.
Esto ha provocado que algunos de sus aliados hayan comenzado a expresar su descontento por lo que han descrito como un excesivo alarde de riqueza por parte de algunos políticos del gubernamental Fidesz.
Un sondeo publicado la semana pasada por Median situó el apoyo a la formación en el 26 por ciento, por debajo del 38 por ciento obtenido en octubre, mientras que el respaldo a Orban ha caído del 48 al 32 por ciento en ese mismo periodo de tiempo.
Por ello, el director del 'think tank' Political Capital, Peter Kreko, ha valorado que el Fidesz está combatiendo en demasiados frentes. "Hay presión en el país, presión diplomática y disputas internas en el partido, viéndose que el Gobierno no es capaz de manejar todos estos conflictos de forma eficiente", ha dicho.
Kreko ha explicado que Orban, reelegido en abril, tendría que hacer frente a nuevas elecciones en 2018, por lo que las protestas no son una amenaza inmediata a menos que se conviertan en algo generalizado y extendido en el tiempo.