LONDRES, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
Miles de manifestantes han salido este sábado a las calles de Belfast para reivindicar la legalización del matrimonio homosexual en Irlanda del Norte, la única región de Reino Unido en la que no es una práctica reconocida debido a la influencia de los conservadores religiosos.
Esta excepción se debe principalmente a la influencia del Partido Democrático Unionista (DUP, por sus siglas en inglés), que rechaza la legalización. Además, el DUP ha incrementado su influencia tras el acuerdo político para respaldar al Gobierno en minoría de la primera ministra británica, Theresa May.
Este mismo viernes un responsable del DUP reconocía que su postura es minoritaria en Reino Unido, pero pedía respeto para ella, lo que no impide que se haya convocado una manifestación para defender el derecho al matrimonio diverso. La iniciativa ha recibido el apoyo de personalidades como el actor Liam Neeson, el cómico Stephen Fry o el pressentador Graham Norton.
La marcha, convocada con el apoyo de Amnistía Internacional, ha contado con la alcaldesa de Belfast Nuala McAllister y los dirigentes del partido nacionalista irlandés Sinn Féin Gerry Adams y Michelle O'Neill, informa el diario 'The Belfast Telegraph'.
La mayoría del Parlamento norirlandés apoya la legalización del matrimonio homosexual, pero el DUP ha utilizado un polémico mecanismo de votación para evitar el cambio legislativo. El DUP rechaza que sea un planteamiento homófobo y argumenta que buscan proteger la definición "tradicional" de matrimonio.
NEGOCIACIÓN DEL NUEVO GOBIERNO DUP-SINN FÉIN
De hecho, la aprobación del matrimonio gay es uno de los puntos de fricción en la negociación de un gobierno de coalición entre el DUP y el Sinn Féin, que intentan evitar que la falta de acuerdo provoque la suspensión de la autonomía norirlandesa.
Tras la manifestación, el presidente del Sinn Féin, Gerry Adams, ha descartado que haya un acuerdo para este lunes. "Creo que es muy improbable que haya un acuerdo este lunes", ha afirmado. "El DUP no tiene ninguna prisa por afrontar la cuestión de la igualdad y de los derechos que provocó la caída de las instituciones políticas", ha añadido.
Adams ha citado política lingüística del irlandés, derechos y laicismo como algunos de los puntos clave que aún generan desencuentros en la negociación.
El lunes termina el nuevo plazo dado por Londres antes de que se suspenda la autonomía norirlandesa después de que se agotara el primer plazo, fijado para el pasado jueves.