MADRID 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
Miles de personas han asistido este sábado al funeral celebrado en la Catedral de Magdeburgo por las cinco víctimas mortales del ataque del viernes en el que murieron cinco personas y más de 200 resultaron heridas en un atropello en un mercadillo navideño.
"¿Hay aún lugares seguros?", ha planteado el obispo protestante Friedrich Kramer durante el acto religiosso que ha incluido el doblar de las campanas a las 19.04, justo 24 horas después del inicio del ataque.
"Los criminales violentos se sitúan en el trono de la atención. Todo tiene que tener que ver con ellos y cualquiera que no se alinee debe morir", se ha lamentado el religioso antes de hacer un llamamiento a la unidad de la sociedad.
También ha participado el obispo católico Gerhard Feige. "El brutal ataque e anoche nos ha dejado iracundos e indefensos, dubitativos y desesperados, sin palabras y conmocionados y sobre todo profundamente afectados", ha apuntado.
Entre los asistentes al funeral estaban el canciller, Olaf Scholz; el primer ministro de Sajonia-Anhalt, Reiner Haseloff; el presidente federal, Frank-Walter Steinmeier o la alcaldesa Simone Borris.
Más tarde, ya entrada la noche, se han producido concentraciones de gurpos de ultraderechistas en el centro de la ciudad, según recogen medios alemanes. La Policía estima que unos 1.000 asistentes están en la plaza central de la capital sajona con pancartas con lemas como "Reemigración" y banderas alemanas. Ha dado un discurso Thorsten Heise, del partido político La Patria, antiguo Partido Nacionaldemócrata de Alemania (NPD).