LONDRES, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
Unos 5.000 policías británicos han rendido homenaje este lunes al agente Keith Palmer, asesinado el pasado 22 de marzo por un terrorista. Los agentes han guardado dos emotivos minutos de silencio en recuerdo de Palmer antes del comienzo del funeral.
Palmer, de 48 años, casado y con un hijo, hacía guardia en el patio delantero del Palacio de Westminster --sede del Parlamento británico-- cuando fue apuñalado por Khalid Masood, un converso al Islam con antecedentes penales.
Antes de atacar a Palmer, Masood había arrollado a varios peatones en el Puente de Westminster con un coche. Cuatro personas murieron atropelladas, incluida la turista rumana Andreea Cristea, quien cayó al río Támesis y falleció 15 días después del ataque. El propio Masood murió tras ser tiroteado por un policía.
El cortejo fúnebre de Palmer estaba encabezado por la Policía Metropolitana con uniforme de gala y agentes a caballo en una "guardia de luto" que han recorrido la distancia entre el Palacio de Westminster --donde los restos han estado durante la noche en capilla ardiente-- y la Catedral de Southwark.
El cuerpo del agente ha pasado la noche en la Capilla de Santa María Bajo Bóveda de Westiminster tras recibir el permiso de la reina, Isabel II, un honor reservado normalmente a personalidades de Estado.
Encima del coche fúnebre había una corona de flores con la frase "El mejor papá" y durante todo el recorrido han sobrevolado el cortejo dos helicópteros de la Policía Nacional.
Medio centenar de miembros de la familia de Palmer han asistido al funeral en la catedral, incluidos su esposa, su hija, su madre, su padre, hermanos y hermanas. El cuerpo ha sido incinerado tras la ceremonia.
La nueva jefa de la Policía Metropolitana, Cressida Dick, se ha estrenado este lunes en el cargo con este funeral. Dick es la primera mujer que dirige Scotland Yard en sus 188 años de historia.