MADRID, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha alertado de que miles de refugiados nigerianos que regresan al norte del país desde Camerún necesitan ayuda humanitaria debido a la precaria situación en la zona.
Al menos 12.000 personas regresaron en mayo, según datos de la ONU, que ha señalado que 1.800 refugiados regresaron a Nigeria en tan sólo un día de la semana pasada. La agencia de Naciones Unidas ha instado a aumentar las ayudas en localidades como Banki, que se encuentra a unos 100 kilómetros de Maiduguri, en el estado de Borno.
"Aunque el número de desplazamientos hasta la zona ha disminuido desde la última semana, estamos muy preocupados. En Banki ya residen unas 45.000 personas que se han visto obligadas a desplazarse a nivel interno debido la violencia", ha indicado el portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Babar Baloch.
Miles de personas han decidido regresar a Nigeria debido a las dificultades a las que se enfrentan en el campo de refugiados de Minawao, en Camerún.
"En Banki, así como en localidades cercanas, el acceso humanitario es muy limitado y depende en gran medida de la disponibilidad del Ejército a la hora de escoltar a los trabajadores hasta las zonas más afectadas", ha indicado Baloch en un comunicado de la ONU.
"Dado que la mayoría de los refugiados no pueden regresar a sus lugares de origen debido a la alta inseguridad, la demanda de refugios y otros productos en las áreas dispuestas para los desplazados de forma interna ha aumentado notablemente", ha añadido.
Según ha denunciado la ONU, los refugiados están durmiendo a la intemperie junto a las pocos objetos personales que aún poseen. Debido a la falta de combustibles, muchos de ellos están quemando plásticos para poder cocinar.
ACNUR ha alertado de la escasez de agua potable y la falta de sanidad. "La agencia de la ONU está haciendo todo lo posible dadas las circunstancias para mejorar las condiciones en la zona y posibilitar el regreso de los refugiados", ha explicado Baloch.
El 3 de marzo, ACNUR y los gobiernos de Camerún y Nigeria firmaron un acuerdo para facilitar los regresos voluntarios. "Se dispondrán sobre el terreno unos 1.500 refugios. La distribución de alimentos supone una necesidad urgente, por lo que instamos a otras organizaciones y agencias humanitarias a colaborar en esta tarea", ha aseverado.
La crisis en la región del Lago Chad, que abarca partes de Nigeria, Níger, Chad y Camerún, ha provocado que 7,1 millones de personas se encuentren en situación de inseguridad alimentaria, incluidos 515.000 niños que presentan malnutrición aguda severa.
Al menos 17 millones de personas se han visto afectadas por la violencia del grupo terrorista Boko Haram y unas 2,7 personas se han visto obligadas a desplazarse.