Milicianos 'chavistas' se despliegan para frustrar "cualquier intención que tenga la derecha de subvertir el orden constitucional"
CARACAS, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
Miles de personas han salido este miércoles a las calles de Caracas en la "gran marcha contra el golpe", convocada por la Mesa de Unidad Democrática (MUD) para denunciar la injerencia del Gobierno de Nicolás Maduro en los demás poderes del Estado y reclamar la celebración de elecciones anticipadas.
Los simpatizantes de la oposición venezolana han partido desde 26 puntos de Caracas con intención de confluir en la sede de la Defensoría del Pueblo, en el centro. Aunque es la principal marcha, tendrá su réplica en las principales ciudades de la nación caribeña, también con destino en las sedes regionales de la institución que dirige Tarek William Saab.
La mayoría de los puntos de salida (19) se encuentra en el municipio caraqueño de Libertador, que alberga igualmente la Defensoría del Pueblo. Su alcalde, el 'chavista' Jorge Rodríguez, ya ha advertido de que no permitirá ningún acto de la coalición opositora en su jurisdicción.
La oposición ha denunciado que, como viene siendo habitual en estas manifestaciones, el oficialismo ha restringido el acceso a Caracas. Así, han cerrado cerca de una veintena de estaciones de metro y han bloqueado la autopista Francisco Fajardo, una de las principales arterias de la ciudad.
"No nos dejan pasar por un punto", ha dicho el vicepresidente de la Asamblea Nacional, Freddy Guevara. "Pues vamos a ver qué van a hacer porque 26 puntos estarán llenos de gente, de ciudadanos en paz, que con firmeza saldrán a recorrer las calles (...) Ante cada obstáculo, gente, gente y más gente", ha instado.
Según el diputado opositor Jorge Millán, ya han comenzado "la represión". "Lanzan bombas lacrimógenas en La Paz", ha escrito en Twitter. Al parecer, uno de los manifestantes ha resultado herido por un disparo de bala en Plaza La Estrella, en San Bernardino, y ha tenido que ser trasladado de urgencia a un centro médico.
MOVILIZACIÓN 'CHAVISTA'
Al mismo tiempo pero en otra zona de Caracas, los simpatizantes del Gobierno participan en la "gran marcha por la independencia y defensa de la patria", que partirá de Plaza Venezuela y desembocará en la Avenida Bolívar. "Vamos a llenar de punta a punta", ha confiado el vicepresidente del gobernante PSUV, Diosdado Cabello.
Cabello ha advertido de que frustrarán "cualquier intención que tenga la derecha de subvertir el orden constitucional". En este sentido, ha anunciado que la Milicia Nacional Bolivariana (MNB), formada por civiles armados, permanecerá en Caracas hasta el término de la jornada.
Maduro, por su parte, ha puesto en marcha el llamado Plan Zamora, un programa especial de carácter cívico-militar para "garantizar el funcionamiento del país, su seguridad, el orden interno y la integración social", en el marco de esta jornada de protestas.
En respuesta, la MUD ha activado el Plan Constitución, para que los venezolanos mantengan la presión en las calles hasta que "se respete a la Asamblea Nacional electa por 14 millones de venezolanos, se abra el canal humanitario para resolver la grave crisis que vivimos los venezolanos y podamos tener elecciones libres sin presos políticos ni inhabilitados".
LLAMAMIENTOS A LA CALMA
En este contexto, el Defensor del Pueblo ha pedido a los manifestantes de uno y otro signo que marchen "en estricto apego a la ley y respeto de la Constitución". "Todos queremos que las diferencias políticas se solucionen hablando", ha sostenido, en una entrevista concedida a la cadena local Globovisión.
En la misma línea se ha pronunciado el ministro de Defensa, Vladimir Padrino. "Ojalá que este día hermoso para todos termine en paz. Pido a Dios desde aquí, y a nuestro padre Libertador, que nos siga dando la paz", ha dicho en Venezolana de Televisión (VTV).
La Conferencia Episcopal, con una gran influencia en la sociedad venezolana, ha pedido "rechazar cualquier manifestación de violencia y respetar los derechos de todos y cada uno de los ciudadanos. Los obispos han instado a "actuar según la recta conciencia, los principios democráticos y las leyes del país".
En mensajes más concretos, la Conferencia ha instado a la oposición a "ejercer el derecho a la manifestación y protesta pública de manera respetuosa con las personas y propiedades" y al Palacio de Miraflores a "defender los Derechos Humanos fundamentales: la vida, la libertad, la salud (...) y los demás derechos de los ciudadanos".
CRISIS VENEZOLANA
La tensión política en Venezuela alcanzó un nuevo pico el pasado marzo, cuando el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) despojó de sus poderes a la Asamblea Nacional --controlada por la oposición desde 2016-- y dejó sin inmunidad parlamentaria a los diputados.
El Gobierno de Maduro ordenó dar marcha atrás en sendas decisiones, algo que el TSJ cumplió, pero la oposición y la Organización de Estados Americanos (OEA) consideran que se ha producido una "ruptura del orden constitucional" que requiere elecciones anticipadas.
Desde entonces, se han intensificado las protestas, en el marco de las cuales han muerto al menos seis personas y cerca de 600 han sido detenidas --aunque muchas ya han sido puestas en libertad--, de acuerdo con la ONG local Foro Penal.