Una milicia proiraní de Irak pide a Bagdad el envío de tropas a Siria ante la ofensiva yihadista y rebelde

Kataib Hezbolá dice que "analiza de cerca la agresión de grupos criminales" y descarta por ahora enviar fuerzas para apoyar a Damasco

MADRID, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -

Una importante milicia proiraní de Irak ha reclamado este martes a las autoridades del país el envío de tropas a Siria para apoyar a las fuerzas gubernamentales ante la ofensiva lanzada la semana pasada por grupos yihadistas y rebeldes contra la provincia de Alepo, que ha provocado un repliegue parcial del Ejército y las fuerzas de seguridad de importantes zonas.

Un portavoz de Kataib Hezbolá ha indicado que "el Gobierno iraquí debe tomar la iniciativa y enviar fuerzas oficiales, en el marco de un acuerdo con el Gobierno sirio, ante la amenaza que suponen estos grupos para la seguridad de Irak y la de la región".

Asimismo, ha destacado que la milicia "analiza de cerca la agresión lanzada por grupos criminales contra el pueblo sirio", antes de destacar que Kataib Hezbolá "aún no ha decidido" si enviará a miembros del grupo "para hacer frente a estos grupos criminales" en el norte y el noroeste de Siria, según un comunicado publicado en su página web.

El grupo es parte de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP), una coalición que integra numerosos grupos paramilitares y milicias proiraníes y que está integrada desde hace años en las fuerzas iraquíes. Las FMP fueron una de las puntas de lanza de la ofensiva contra Estado Islámico en Irak y en Siria han respaldado a las fuerzas de Bashar al Assad.

El comunicado ha sido publicado después de que el Ministerio del Interior iraquí anunciara el lunes un refuerzo de la frontera con Siria a través del envío de unidades adicionales del Ejército y las fuerzas de seguridad, incluidos integrantes de las propias FMP.

La ofensiva de rebeldes y yihadistas, encabezados por Hayat Tahrir al Sham (HTS), es la primera ofensiva a gran escala desde que los presidentes de Turquía y Rusia, Recep Tayyip Erdogan y Vladimir Putin, respectivamente, pactaran en 2020 un alto el fuego tras meses de combates. Moscú es uno de los principales apoyos internacionales del presidente sirio y su intervención militar en 2015 permitió a las fuerzas gubernamentales repeler los avances rebeldes y estabilizar los frentes.