El miliciano que hirió a tres policías en Yakarta tenía varias bombas y munición

Actualizado: viernes, 21 octubre 2016 11:45

YAKARTA 21 Oct. (Reuters/EP) -

El miliciano inspirado en Estado Islámico que murió abatido a tiros el jueves tras herir a tres policías en las afueras de Yakarta tenía varias bombas caseras, munición real y una katana de samurái en su domicilio, según han informado las autoridades indonesias.

El ataque del jueves ha sido el último de una serie de incidentes relacionados con Estado Islámico este año en el país con más musulmanes del mundo y en el que está aumentando la preocupación por el auge de los grupos milicianos locales.

En la vivienda del autor del ataque la Policía ha encontrado munición real, materiales para fabricar bombas y una katana de samurái, según ha contado un portavoz de la Policía, Boy Rafli Amar.

"Había preparado varias bombas caseras", ha afirmado el portavoz policial, en una rueda de prensa. "Estamos ahora investigando con quién ha estado en comunicación", ha añadido. Estado Islámico ha reivindicado este viernes la responsabilidad por el ataque, en un mensaje publicado en su agencia de noticias Amaq.

El autor del ataque apuñaló a tres agentes de Policía y lanzó una bomba casera que no llegó a estallar antes de morir abatido por disparos de la Policía. La Policía ha confirmado que el autor del ataque, Sultán Aziansyah, era miembro del grupo terrorista Jamá Ansharut Daulá, que apoya a Estado Islámico.

Este grupo terrorista fue formado en 2015 basándose en una alianza de grupos que apoyan a Estado Islámico y está liderado por el clérigo islamista Amán Abdurrahman, que está cumpliendo una condena de nueve años de prisión por colaborar en un campo de entrenamiento de milicianos.

Las autoridades creen que Estado Islámico tiene más de 1.200 seguidores en Indonesia y que unos 400 indonesios se han unido a las filas del grupo terrorista en Siria. La Policía está en alerta ante la posibilidad de que regresen milicianos indonesio como consecuencia de la ofensiva por la ciudad de Mosul, el principal bastión de Estado Islámico en el norte de Irak.

Las autoridades indonesias están vigilando a unos 40 retornados que creen que podrían estar vinculados a las redes actuales de milicianos, según contó a Reuters el lunes Tito Karnavian, un alto mando policial. En enero, cuatro milicianos llevaron a cabo un ataque con bomba y armas de fuego en el centro de Yakarta, el primer ataque en el Sureste Asiático reivindicado por Estado Islámico y que acabó con ocho muertos, incluidos los atacantes.