ERBIL (IRAK), 7 (Reuters/EP)
Los milicianos del Estado Islámico han matado a decenas de civiles en Mosul en los últimos días por intentar huir y han colgado varios de sus cuerpos en algunos de los postes eléctricos que rodean la ciudad a modo de advertencia, al mismo tiempo que las fuerzas del Ejército iraquí luchan para recuperar la ciudad.
Las tropas iraquíes están encontrando una importante resistencia por parte de los yihadistas en su ofensiva para recuperar el control de casco histórico de la ciudad, en el oeste de Mosul, donde se espera que la contienda se desarrolle entre las callejuelas que rodean a la mezquita desde donde Abu Bakr al Baghdadi proclamó su califato.
Uno de los civiles que todavía vive en el oeste de Mosul ha contado que encontró el cuerpo de uno de sus familiares colgando de un poste de electricidad junto a otros tres cadáveres. Todos ellos habían sido interceptados por los milicianos mientras intentaban huir de la zona.
"Su apariencia era impactante. No fuimos capaces de bajarlos de allí y siguen colgados desde hace dos días", ha explicado. De acuerdo con el Consejo de Seguridad del Kurdistán iraquí, al menos 140 personas fueron ejecutadas por el Estado Islámico entre el lunes y el martes.
El la Ciudad Vieja de Mosul, más de 40 civiles han sido asesinados por los milicianos al ser interceptados mientras intentaban huir, de acuerdo con un residente del distrito de Farouq, muy cercano al centro histórico de la ciudad.
Según el testimonio de otra mujer residente en el oeste de Mosul, una familia de seis personas, incluida una anciana, fue ejecutada por el mismo motivo.
OFENSIVA
Estado Islámico controla Mosul desde verano de 2014 y la ha convertido en su principal bastión en Irak. Las fuerzas de seguridad iraquíes lanzaron una ofensiva en octubre para intentar recuperar la ciudad.
A finales de enero, el Ejército anunció la toma de todos los barrios de Mosul ubicados al este del río Tigris, si bien los yihadistas siguen controlando la zona occidental de la ciudad.
El primer ministro de Irak, Haider al Abadi, ordenó el 19 de febrero el reinicio de la ofensiva contra los yihadistas en el oeste de la ciudad, pidiendo a sus tropas que "respeten los Derechos Humanos".
Los milicianos yihadistas están prácticamente rodeados en la parte occidental de Mosul, donde aún quedan unos 750.000 civiles tras la toma de la parte oriental de la ciudad el pasado mes de enero tras más de tres meses de combates.
Unos 400.000 civiles podrían tener que huir de sus hogares como consecuencia de los combates en el oeste, muy afectado ya por la escasez de alimentos y combustibles, según advirtió el sábado la coordinadora humanitaria de la ONU para Irak, Lise Grande.