ANKARA, 18 Jul. (Reuters/EP) -
Los ocho soldados turcos que el sábado huyeron a Grecia después del golpe de Estado lanzado por una facción militar contra el Gobierno presidido por Recep Tayyip Erdogan "temen por su vida" si finalmente son repatriados, ha dicho su abogado.
Su helicóptero había sido atacado por la Policía turca sin que, según su versión, supieran qué pasaba. Poco después recibieron mensajes en sus teléfonos móviles avisándoles de que había un golpe de Estado en marcha y decidieron huir a Grecia.
A su llegada a la ciudad griega de Alexandroupolis fueron detenidos por las fuerzas de seguridad locales por violar la integridad territorial de Grecia. Ahora, los ocho están a la espera de ser juzgados por entrar ilegalmente al país vecino.
Erdogan ha reclamado la extradición de los soldados por "traidores", a lo que el Gobierno de Alexis Tsipras ha respondido que analizará la posible entrega a la luz de las normas aplicables de Derecho Internacional y Derechos Humanos.
Vasiliki Ilia Marinaki, abogado de cuatro de los soldados, ha asegurado que sus clientes desconocían "por completo" la existencia de un golpe de Estado y que se limitaron a seguir órdenes de sus superiores. "Temen que sus vidas estén en peligro. Por eso no quieren volver a Turquía y han pedido asilo político", ha contado a Skai TV.
Estaba previsto que la situación judicial de los soldados turcos se resolviera este lunes pero los tres abogados que los representan han solicitado un aplazamiento para el 21 de julio. El piloto está acusado de violar el espacio aéreo griego y los otros siete de cómplices.
GOLPE FALLIDO
A última hora del viernes un grupo de militares puso en marcha un golpe de Estado para "restaurar la democracia secular" del que Erdogan ha acusado directamente al influyente clérigo Fetulá Gulen, exiliado en Estados Unidos.
De acuerdo con el balance oficial, en 208 personas murieron a manos de los golpistas --145 civiles, 60 policiales y tres soldados--, mientras que 1.491 personas resultaron heridas. Además, en la respuesta de las fuerzas de seguridad a la asonada perdieron la vida 24 de los participantes en el golpe, mientras que otros 50 resultaron heridos.
Por otra parte,7.543 personas han sido detenidas en relación con el golpe fallido, de las cuales 100 eran oficiales de Policía, 6.038 eran militares de distinto rango, 755 eran jueces y fiscales y 650 eran civiles. Del total, se ha dictado ya prisión provisional contra 316 de ellos.