NUEVA YORK 16 Ene. (Reuters/EP) -
Los 'millennials' estadounidenses, aquellos que nacieron entre comienzos de 1980 y 2000, se movilizan por primera vez y salen a la calle a manifestarse con la llegada de Donald Trump al poder. Así, participarán en marchas como la manifestación en defensa de los derechos de las mujeres que se celebrará en Washington este sábado, el día posterior a la toma de posesión de Trump.
En Estados Unidos hay un total de 74,5 millones de 'millennials', de los cuales el 73 por ciento están en contra de Trump, según el Centro de Investigación Pew. "Es un verdadero punto de inflexión para esta generación", ha asegurado la autora de un libro sobre 'millennials', Elisabeth Kelan.
La Marcha del Millón de Mujeres es una muestra de oposición al impacto de Trump sobre los derechos de la mujer, particularmente al acceso al aborto, los seguros de salud, cuidado infantil y las políticas de empleo que podrían afectar a las mujeres jóvenes, según han asegurado los activistas.
La manifestación reivindica el acceso al aborto y anticonceptivos, la igualdad de salarios, un cuidado de los niños asequible, los derechos para personas homosexuales, bisexuales y transgénero y acabar con la violencia contra la mujer.
Trump ha recibido varias críticas debido a su actitud hacia las mujeres. En un vídeo de 2005 que salió a la luz durante la campaña electoral, Trump presumía de poder hacer todo lo que quería a una mujer sólo por el hecho de ser una "estrella".
El presidente electo se opone al aborto y se ha comprometido a recortar la financiación pública a la Federación de Planificación Familiar de América (PPFA), una organización que incluye la financiación pública de métodos anticonceptivos e interrupción voluntaria del embarazo para las personas con menos ingresos.
Según los organizadores de la campaña habrá más de 500.000 participantes, entre ellos numerosas personalidades del país, incluidas mujeres del mundo del cine y del espectáculo como Scarlett Johansson, Frances McDormand, Julianne Moore, Cher o Katy Perry.
Muchas de las participantes llevarán gorros de lana rosas gracias a una campaña que se ha hecho viral: el proyecto Pussyhat, un nombre que hace un juego de palabras entre las orejas de gato que simula el gorro y los genitales de la mujer.
La campaña, iniciada a finales de noviembre, partió de dos aficionadas a hacer punto, Krista Suh y Jayna Zweiman, como fórmula de protesta contra las declaraciones machistas de Trump. Suh y Zweiman publicaron una página web (https://www.pussyhatproject.com) en la que se puede descargar el patrón del gorro, tan sencillo que está al alcance de cualquier persona con un mínimo conocimiento de punto, ganchillo o costura, e invitaron a cualquiera a tejerse un gorro para sí o para las participantes en la marcha sobre Washington.