MADRID, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
El aumento de la violencia y la creciente crisis humanitaria en Yemen ha provocado que millones de personas se hayan visto obligadas a desplazarse, según han denunciado de forma conjunta el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que han alertado de que un millón de los yemeníes desplazados se enfrentan ahora al peligro de regresar a sus hogares.
Desde que comenzó el conflicto en 2015, más del 11 por ciento de la población de Yemen, cerca de 3 millones de personas, han abandonado sus hogares en busca de una mayor seguridad. Sin embargo, la situación actual ha obligado a un millón de personas a regresar a sus lugares de origen a pesar de la inseguridad.
La OIM y ACNUR han alertado a través de su Grupo de Trabajo para el Movimiento de la Población (TFPM, por sus siglas en inglés) del continuo deterioro de la situación y han indicado que un gran número de personas están considerando la posibilidad de regresar a sus viviendas, donde se enfrentarán a unas precarias condiciones socio-económicas.
Ambas agencias de la ONU, que han realizado un informe al respecto, han destacado que la falta de acceso a los servicios más básicos en las zonas en las que se han establecido la mayoría de los desplazados internos ha provocado que muchos de ellos decidan volver a sus hogares.
Según el documento, durante los próximos meses las autoridades del país registrarán un aumento de las migraciones a nivel interno. "Que los que se trasladaron a otras zonas huyendo del conflicto decidan regresar ahora a sus hogares es una muestra de la catastrófica situación en Yemen", ha señalado el representante de ACNUR en el país, Aymar Gharaibeh.
"Las dificultades en las comunidades en las que se han establecido son tan amplias como aquellas a las que se enfrentarían en los lugares que abandonaron en su día", ha aseverado Gharaibeh, que ha indicado que las viviendas se encuentran normalmente "dañadas".
"Necesitan asistencia humanitaria si regresan, por lo que esto no puede ser visto como algo positivo", ha añadido. Según ACNUR, todas las gobernaciones de Yemen se han visto afectadas por el conflicto entre las fuerzas progubernamentales y las facciones rebeldes.
ESCASEZ DE ALIMENTOS
"La mayoría de los desplazados yemeníes han regresado a Adén, Amanat al Asimá y Taiz, que se han visto fuertemente afectadas por las hostilidades y la violencia", ha afirmado Gharaibeh. La mayor preocupación de los desplazados es la falta de alimentos y la posibilidad de contraer enfermedades como el cólera.
El jefe de la misión de la OIM en Yemen, Laurent de Boeck, ha indicado que la mayoría sufren estrés y angustia. "La OIM está comprometida con los yemeníes que han buscado refugio en campos de desplazados y están viviendo bajo unas condiciones terribles, con un acceso limitado al agua", ha aseverado De Boeck.
Las comunidades a nivel local, que se encuentran desbordadas por la crisis, también se enfrentan a la escasez de alimentos. El 84 por ciento de los 2 millones de desplazados a nivel interno en Yemen llevan más de un año en esta situación, según ACNUR.
"Es imperativo que las organizaciones humanitarias adapten la respuesta para salvar el mayor número de vidas. También es importante reconstruir las infraestructuras dañadas para mejorar el acceso a los servicios", ha manifestado De Boeck.
Hasta la fecha, el 17 por ciento de los desplazados han buscado refugio en las zonas del centro y el oeste del país, donde se ha registrado un gran número de hostilidades.