Ministerio de Defensa israelí defiende su decisión de cambiar su política de voluntariado

Publicado: lunes, 15 agosto 2016 5:33

El 'número dos' de la cartera sugiere que los refugiados procedentes de África no tienen que ser rescatados del mar

MADRID, 15 Ago. (EUROPA PRESS) -

El 'número dos' del Ministerio de Defensa de Israel, Eli Ben Dahan, ha defendido este domingo la decisión del Ministerio de cancelar un programa de voluntariado para soldados después de que la activista de extrema derecha Sheffi Paz denunciara que miembros de las Fuerzas Armadas estaban jugando con varios hijos de solicitantes de asilo africanos en un área destinada al desarrollo de actividades y programas de educación.

Ben Dahan, que se comprometió a que "esas escenas no se repitan", ha alabado esta decisión, alegando que la comunidad africana en Tel Aviv no necesita ayuda.

En una entrevista con la radio del Ejército, Ben Dahan ha asegurado que "ninguno de los 150.000 infiltrados ilegales" han sido "clasificados como refugiados", por lo que no es necesario "que se les extienda una mano de ayuda" ni que "sean sacados del agua y salvados de ahogarse", según declaraciones recogidas por 'Times of Israel'.

Las cifras oficiales apuntan a que cerca de 47.000 migrantes irregulares residen actualmente en Israel, la gran mayoría procedentes de Eritrea o Sudán. La mayor parte viven en barrios muy pobres en el sur de la capital.

El 'número dos' del Ministerio ha señalado que este tipo de migración ha sido perjudicial para el Estado: "Hay gente que se ha infiltrado en Israel, robando el empleo a los israelíes y haciendo que el sur de Tel Aviv sea un lugar donde es imposible vivir", ha señalado Ben Dahan.

Sin embargo, no es la primera vez que el 'número dos' de Avigdor Lieberman, titular de la cartera de Defensa, se ve envuelto en una polémica por su actitud claramente influida por términos raciales, sino que ya en el pasado había pronunciado afirmaciones peyorativas contra los palestinos.

Volviendo a la cuestión del programa de voluntariado, Ben Dahan ha señalado que los "soldados israelíes deben hacer voluntariado en programas que beneficien a los ciudadanos israelíes".

ORDEN DE LIEBERMAN

Este mismo domingo, el titular de la cartera ha ordenado a los soldados de las Fuerzas de Defensa (IDF, por sus siglas en inglés) que pongan fin a su colaboración con Elifelet, la organización con la que estaban cooperando con niños hijos de migrantes en el sur de la capital.

"Si los soldados tienen tiempo libre, deberían ayudar a los supervivientes del Holocausto o a los necesitados", ha indicado Lieberman al jefe del Estado Mayor, Gadi Eisenkot, según el diario 'Yedioth Ahronoth'. "La bondad debe empezar en casa", señaló Lieberman.

Además de las quejas por parte de activistas de extrema derecha, algunos residentes también mostraron su descontento al ver a los soldados jugando con los pequeños. "Cuando vi a los soldados jugando con esos niños, me sentí traicionado", asegura uno de los residentes de la zona, May Golan, que lidera un grupo que lucha contra la presencia de migrantes irregulares en Tel Aviv.

Golan sostiene que esta actitud "es una de las cosas más inaceptables que las Fuerzas Israelíes y el Estado Israel puede hacer". "Las IDF son un cuerpo estatal oficial y moral, que se supone que tiene que proteger la ley y la nación, pero haciendo voluntariado con niños de trabajadores extranjeros están ignorando el estatus ilegal de esas personas", ha lamentado.

Por su parte, los soldados israelíes que participaban en este proyecto no comprenden el enfado de los residentes. "Fue un gran día y aprendimos mucho", asegura uno de los participantes. "Conocí a gente que estaba lidiando con grandes dificultades, y me sentí contento de poder ayudarlos un día", ha explicado.

Este soldado reconoce que fue "importante" que los miembros de las fuerzas de seguridad participen en este tipo de voluntariado "porque permite verlos bajo una luz diferente".

Elifelet es una organización sin ánimo de lucro que ayuda a cientos de niños procedentes de familias de migrantes que tienen determinados problemas vinculados a la pobreza. Su objetivo es, entre otros, proteger a los niños de la "persecución racial".