ESTAMBUL, 5 Ago. (Reuters/EP) -
El ministro de Asuntos Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglu, ha manifestado este viernes que Austria es "la capital del racismo radical" después de que el canciller austriaco, Christian Kern, sugiriera terminar con las conversaciones entre Ankara y la Unión Europea sobre una posible adhesión de Turquía al bloque comunitario.
Cavusoglu ha indicado que los comentarios de Kern, realizados en el marco de la purga que está teniendo lugar en Turquía como consecuencia del intento de golpe de Estado del 14 de julio, eran "desagradables".
"El canciller de Austria debería tener en consideración primero los problemas de su propio país. Muchos creen que Austria es la capital del racismo radical, así como un enemigo de los Derechos Humanos", ha señalado Cavusoglu.
Kern ha advertido de que empezará a debatir con sus homólogos europeos sobre el fin de las conversaciones con Turquía debido al déficit económico y democrático que presenta el país. Según Kern, las conversaciones han avanzado muy poco desde que comenzaron en 2005.
El ministro de Asuntos Exteriores de Austria, Sebastian Kurz, ha instado a Ankara a moderar sus acciones y palabras. El Partido austriaco Socialdemócrata ha estado bajo presión por parte de las formaciones conservadoras, que han logrado un 35 por ciento de los votos a través de una plataforma antiinmigración.
Los líderes europeos, por su parte, han mostrado su preocupación ante las medidas tomadas por le presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en relación con el trato a los disidentes y la posible restauración de la pena capital en el país.
El acuerdo de inmigración establecido entre el bloque comunitario y Turquía, que implica la redistribución de refugiados a cambio de 3.000 millones de euros y de acelerar las conversaciones sobre la adhesión del país en la Unión Europea, podría verse comprometido debido a que Ankara considera que las autoridades europeas no están cumpliendo con lo acordado.
"Si hay un acuerdo, ambas partes deben comprometerse a cumplir lo establecido en él. En caso contrario, lo mejor es derogarlo. No hay otro camino", ha afirmado Cavusoglu.