MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, estaría intentando aplazar la votación final sobre la primera ley de la polémica reforma judicial que impulsa el primer ministro, Benjamin Netanyahu, en medio de las multitudinarias protestas de la población.
Está previsto que el lunes o el martes se apruebe en la Knesset o Parlamento israelí pese a la contestación, por lo que Gallant "está tomando medidas para lograr un consenso amplio y garantizar la seguridad del Estado de Israel", ha destacado el propio ministro en un comunicado recogido por 'The Times of Israel'.
Gallant ya logró en marzo parar la tramitación de la reforma judicial y que Gobierno y oposición se sentaran a negociar con la mediación del presidente israelí, Isaac Herzog, tras las protestas masivas, una huelga general y el cierre del Aeropuerto Internacional Ben Gurion.
Ahora Gallant ha mantenido contactos con los líderes de los partidos que forman la coalición que lidera Netanyahu y con los partidos de la oposición para intentar aplazar el receseo estival de la Knesset, informa la televisión Canal 12.
Gallant también se ha reunido con el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas isarelíes, Herzi Halevi, y con el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Aéreas, Tomer Bar, porque el ministro no puede ser "indiferente" a las consecuencias para la seguridad de las protestas y negativa a realizar voluntariado militar, según el diario 'Yedioth Aharonoth'.
Otros miembros de la coalición de Netanyahu como el líder del partido Shas, Aryeh Deri, también estarían en contra de impulsar unilateralmente una reforma de este calado para contentar a figuras más radicales del Gobierno como Yariv Levin, Bezalel Smotrich o Itamar Ben Gvir.
"Deri está descontento con el comportamiento y las declaraciones de Levin, Smotrich y Ben Gvir. Quiere parar la carrera hacia el abismo", según fuentes del 'Yeidoth'.
Sin embargo, fuentes gubernamentales consultadas este sábado apuntan a que Netanyahu no tiene intención de parar la tramitación de la ley.
"La postura del Gobierno y de la coalición es inequívoca: el mayor daño a la seguridad y la democracia de Israel es la subordinación del Gobierno y la Knesset a los dictados de unidades militares", han planteado fuentes oficiales en referencia a la negativa a prestar voluntariado militar anunciada reciementemente por miembros de las Fuerzas Aéreas.
"Seguiremos intentando lograr un acuerdo sobre esta legislación hasta el últimoi momento. Si no hay acuerdo, la legislación será aprobada según lo previsto", ha remachado.