Ankara ve "inaceptable" la investigación contra Dermiral, que festejó su segundo gol frente a Austria con el símbolo de la organización paramilitar Lobos Grises
MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
Las autoridades turcas han convocado este miércoles al embajador de Alemania en el país, Jurgen Schulz, para trasladarle su protesta por las críticas vertidas por varios ministros alemanes contra el futbolista turco Merih Dermiral, que celebró uno de los goles marcados ante la selección de Austria haciendo un símbolo asociado a la organización Lobos Grises, una formación paramilitar de extrema derecha fundada en los años sesenta.
Tras la apertura de una investigación disciplinaria por parte de la UEFA y las reprobaciones vertidas tanto por la ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser, como por el ministro de Agricultura de Alemania, Cem Ozdemir, el Ministerio de Exteriores de Turquía ha dado un paso al frente, según informaciones de la agencia turca de noticias Anatolia.
Asimismo, las autoridades han calificado de "inaceptable" la investigación disciplinaria abierta por la UEFA contra el futbolista y han señalado en un comunicado que "teniendo en cuenta que el símbolo no está prohibido en Alemania, la reacción de las autoridades alemanas a las acciones del futbolista "son xenófobas".
En este sentido, han recordado que en informe realizado en 2023 por la Inteligencia alemana se señala explícitamente que "el símbolo en cuestión no siempre puede ser atribuido a personas de extrema derecha". "Condenamos estas reacciones, que son de corte político, ante el uso de un símbolo histórico y cultural durante la celebración de un evento deportivo", han aclarado.
Por su parte, el ministro del Interior, Ali Yerlikaya, ha aseverado que "un símbolo histórico y cultural no puede equipararse al racismo", a la par que ha incidido en separar "la xenofobia, el racismo y el discurso de odio" de los "valores, la cultura y las creencias nacionales".
"El éxito de Bizim Cocuklar (término turco para la expresión 'Nuestros hijos') en Alemania no puede verse eclipsado por agendas artificiales", ha aseverado el ministro Yerlikaya en su perfil oficial de la red social X, anteriormente conocida como Twitter.
CRÍTICAS DESDE EL GOBIERNO ALEMÁN
Previamente, Faeser ha recalcado que "los símbolos de la extrema derecha turca no tienen cabida los estadios" de Alemania, país en el que se celebra el campeonato. "Utilizar la Eurocopa como una plataforma para el racismo es completamente inaceptable", ha señalado en un mensaje de X antes de expresar su deseo de que la UEFA "considere adoptar sanciones" contra el futbolista.
"Nuestras autoridades de seguridad vigilan de cerca a los turcos de extrema derecha en Alemania", ha recalcado, al tiempo que ha incidido en que los Lobos Grises "están bajo vigilancia de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución", nombre con el que se conoce la principal agencia de Inteligencia del Gobierno.
Ozdemir, por su parte, ha afirmado que la postura de Demiral, quien marcó los dos goles de Turquía en su victoria por 2-1 frente a Austria, traslada "un mensaje de extrema derecha" que "representa el terror y el fascismo".
"Hablar de esto es agotador. La UEFA debe hacer que haya consecuencias. También se debe mantener la tolerancia fuera del estadio", ha señalado Ozdemir, quien ha abundado además en que "cualquiera que pida un cortafuegos" contra el partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) "debe también construir uno contra el fascismo turco".
En esta línea, Ozdemir se ha preguntado "por qué no se ha prohibido la exhibición del símbolo de los Lobos Grises" en el país y ha aplaudido que Austria sí haya dado este paso. "Este gesto de extrema derecha simboliza el antisemitismo repugnante", ha subrayado, tal y como ha recogido la agencia alemana de noticias DPA.
IDENTIDAD TURCA
Demiral, de 26 años, justificó su gesto tras el partido. "La forma en que lo celebré tiene algo que ver con mi identidad turca", afirmó, antes de hacer hincapié en que su objetivo era expresar el orgullo que sentía por ser ciudadano turco. De hecho, posteriormente publicó una fotografía suya haciendo el gesto durante la celebración en su cuenta en X junto al mensaje "cómo de feliz es aquel que dice que es turco".
Dicha frase, acuñada por el fundador de la Turquía moderna, Mustafá Kemal Ataturk, tiene connotaciones negativas para las minorías en el país euroasiático, entre ellos kurdos y armenios. Los Lobos Grises --ilegalizados en Francia y cuyo nombre oficial en turco es 'ulkuculer', que significa 'idealistas'-- son conocidos por su responsabilidad en numerosos ataques contra miembros de estas minorías.
Esta formación, de corte nacionalista, racista y neofascista y que en los setenta estuvo implicada en ataques de guerrilla contra izquierdistas y activistas en Turquía, mantiene lazos con el partido ultranacionalista Partido del Movimiento Nacionalista (MHP), liderado por Devlet Bahçeli y actualmente el principal aliado del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
Los Lobos Grises habrían sido responsables del asesinato de más de un centenar de alevíes en diciembre de 1978 en la ciudad de Maras y habrían estado implicados en varios conflictos en el extranjero, donde participaron como mercenarios, incluida la Primera Guerra de Nagorno Karabaj --llegando a respaldar un intento de golpe de Estado en Azerbaiyán en 1995-- y en las guerras en Chechenia. Además, uno de sus integrantes más conocidos es Mehmet Alí Agca, quien fue el responsable de un intento de asesinato del Papa Juan Pablo II en 1981.