MADRID, 21 May. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Grecia, Kyriakos Mitsotakis, y el líder de la oposición, Alexis Tsipras, han depositado ya su voto en las elecciones generales que se celebran este domingo en el país entre promesas de futuro para el electorado, especialmente en el ámbito laboral.
"Hoy votamos por nuestro futuro, por salarios más altos y una sociedad con menos desigualdad, por mejores trabajos y una Sanidad pública más eficaz", ha declarado Mitsotakis tras presentar su papeleta en el barrio ateniense de Kifisia.
Más de 9,8 millones de personas están llamadas a las urnas este domingo, pero uno de los aspectos a tener en cuenta será precisamente cuántas de ellos responderán a esta llamada.
En los últimos comicios parlamentarios, la abstención superó el 40 por ciento, y la oposición de SYRIZA confía en que estos datos remonten para lograr una mayor movilización de la izquierda y dar la vuelta a los sondeos.
La economía y el paro, que ronda el 12 por ciento, siguen siendo una cuestión de primer orden entre las preocupaciones del griego de a pie. Pese a la que inflación se moderará este año, también lo hará el crecimiento, que la Comisión Europea sitúa en el 2,4 por ciento en las previsiones de 2023 que ha publicado esta misma semana y en las que se anticipa un nivel de endeudamiento cercano al 160 por ciento del PIB.
A esta situación se ha referido Tsipras, el líder de SYRIZA, cuando ha acudido al céntrico barrio de Kipseli, también en la capital, donde ha descrito estas elecciones como el escenario ideal para que "la ciudadanía manifieste una petición mayoritaria para cambiar el rumbo del país".
"Tenemos que dejar atrás cuatro años difíciles de desigualdades, injusticias, oportunismos, inseguridad laboral e indignidad para los pensionistas", ha declarado Tsipras antes de criticar la "arrogancia" de un gobierno que no siente las necesidades de mucha gente"
"El cambio está en manos del pueblo", ha remachado, en comentarios recogidos por el diario 'Kathimerini' en su edición digital.