MADRID, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Zimbabue, Emmerson Mnangagwa, ha prometido este miércoles una política de 'tolerancia cero' con la corrupción, resaltando que la misma es uno de los principales desafíos a los que hace frente el país.
"La corrupción sigue siendo la principal fuente de algunos de los problemas a los que hacemos frente como país y tiene un impacto negativo en el desarrollo del país en el que no se puede poner el suficiente énfasis", ha dicho.
Mnangagwa ha indicado que "no habrá vacas sagradas" en la lucha contra la corrupción, añadiendo que "los culpables harán frente a todo el peso de la ley", según ha informado el diario zimbabuense 'The Herald'.
El actual mandatario ha insistido en numerosas ocasiones desde su llegada al poder en la necesidad de relanzar la economía del país y este miércoles ha insistido en que respetará el estado de Derecho y que en 2018 se celebrarán elecciones "creíbles".
Mnangagwa era vicepresidente del país hasta el pasado 6 de noviembre, cuando Robert Mugabe le cesó acusándole de traición por querer sucederle. La medida fue vista como un intento de éste de allanar el camino para que la primera dama, Grace Mugabe, fuera quien la sucediera.
La decisión del veterano dirigente no sentó bien en el Ejército, que amenazó con intervenir si el presidente no daba marcha atrás, cumpliendo con su amenaza el 14 de noviembre, cuando intervino para forzar la decisión de Mugabe.
Este era el último escollo que le quedaba por superar a Mnangagwa, que inmediatamente fue propuesto por ZANU-PF para ocupar la plaza vacante. 'Cocodrilo', como se le conoce popularmente, se convirtió este 24 de noviembre en el segundo presidente en la historia del país.