BRUSELAS, 5 May. (EUROPA PRESS) -
La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, ha admitido que la imprevisibilidad que caracteriza al presidente estadounidense, Donald Trump, puede provocar reacciones contrarias en terceros y llevar a situaciones peligrosas y ha dejado claro que "la Unión Europea no juega con provocaciones".
"A veces puedes ahuyentar a tu interlocutor y provocar otra reacción y luego es demasiado tarde", ha admitido la jefa de la diplomacia europea, al ser preguntada por si la imprevisibilidad de Trump es una ventaja o un problema, por ejemplo en la crisis con Corea del Norte, durante una charla organizada por el Instituto Universitario Europeo en Florencia (Italia). "No lo sé", ha admitido.
"No se juega con provocaciones. No se juega con cosas que pueden dar un resultado excelente pero también ser peligrosas", ha explicado, dejando claro que es partidaria de la diplomacia "silenciosa, cooperativa, racional" y "construir asociaciones" con terceros. "Es menos sensacionalista, pero te lleva al objetivo de vivir en un entorno de colaboración. Hay que salir de este juego de suma cero", ha subrayado, recordando que los países europeos "claramente" apostaron por la cooperación al poner en marcha el proyecto europeo, por ser "mucho más beneficioso para todos, que la confrontación y el conflicto".
La jefa de la diplomacia europea ha admitido que "en la política exterior hay que combinar" tácticas pero "es difícil" desde el principio decir si se hace de forma "adecuada" y en ocasiones solo se ve que no ha sido la adecuada "después". "Y esto es peligroso", ha avisado.
"A veces se puede jugar con la imprevisibilidad para sorprender a tu interlocutor y obtener algo, pero a veces puedes ahuyentar a tu interlocutor y provocar otra reacción. Y luego es demasiado tarde para arreglarlo. La manera europea no es jugar con la previsibilidad o la imprevisibilidad", ha argumentado.
Mogherini ha dejado claro que entre dar "titulares" de prensa pero luego "crear un problema" o "hacer algo útil", personalmente, "siempre" elegirá ser "responsable". "El objetivo que tenemos es intentar resolver problemas", ha justificado.
La jefa de la diplomacia europea ha insistido en que la cooperación está "en la raíz de la política exterior" de la UE y se ha mostrado en desacuerdo con el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, por defender hace unos días que "el interés nacional está por delante de los Derechos Humanos en política exterior".
"Pues para nosotros no hay una contradicción entre nuestros intereses y nuestros valores. Invertir en sociedades fuertes, basadas en el Estado de Derecho y los Derechos Humanos es la mejor manera de tener sociedades seguras", ha replicado.
Mogherini, que ha avanzado que volverá a desplazarse a Estados Unidos la semana que viene, ha incidido en que la UE y Estados Unidos tienen "una posición diferente" en cuestiones como el cambio climático, en la contribución de la ayuda al desarrollo para prevenir conflicto o el libre comercio y hay "desafíos" para las relaciones bilaterales pero "también oportunidades", insistiendo en que ve a la Administración estadounidense "extremadamente implicada y comprometida con las relaciones entre Estados Unidos y la UE".
"Veo un interés en trabajar juntos en seguridad", ha dicho Mogherini, evocando las crisis siria, libia, Corea del Norte y Ucrania, donde ha celebrado que "la nueva Administración ha confirmado la posición de la Administración precedente". "Tenemos, como Unión Europea, que hacer mucho más en seguridad y defensa", ha admitido.
Y, sobre el acuerdo nuclear iraní, cuestionado por Trump, Mogherini ha defendido que "es un acuerdo que está funcionando" y ha recalcado que "no puede ser desmantelar sólo por parte americana". "Pertenece a la comunidad internacional", ha avisado. "Creo que la nueva Administración americana entiende que no está en el interés de nadie en esta parte de la región arriesgar un rumbo diferente (...) y desmantelar el acuerdo", ha dicho.
Al margen de la seguridad, Mogherini también ha asegurado que Estados Unidos tiene "interés económico" en cooperar con la UE, que "es indispensable" para Estados Unidos también porque "millones" de puestos de trabajo en Estados Unidos también dependen de su acceso al mercado interior europeo.
"Tenemos mucho en común y también corremos el riesgo de perder mucho si no cuidamos de la prosperidad y la fortaleza del otro", ha avisado.
En todo caso, Mogherini ha defendido que la UE se posicione en el mundo como "un socio fuerte, fiable y previsible" en "grandes cuestiones globales donde quizá Washington está perdiendo liderazgo y donde otros en el mundo buscan socios", recalcando que en su gira a China, India y Rusia escuchó "el mismo mensaje" a favor de "una Unión Europea fuerte" y para "cooperar estrechamente".
"La gente quiere trabajar ahora con la UE en estos momentos. No porque siempre les gustemos. Hay muchas cosas que no necesariamente les gusta de nosotros, pero saben qué esperar de nosotros, somos predecibles", ha argumentado.
"Y en la actual dinámica geopolítica, ser previsible, fiable y fuerte, como nosotros, es un gran valor añadido que debemos usar para ocupar el espacio que podamos", ha remachado.