Mogherni avisa a los 28 de que ya "no hay tiempo para debates teóricos" sobre el refuerzo de la defensa europea

La cooperación estructurada permanente necesita más reflexión, admite la jefa de la diplomacia europea

BRUSELAS, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, ha avisado a los Veintiocho de que ya "no hay tiempo para debates teóricos o filosóficos" sobre la necesidad de un refuerzo de la defensa en Europa y ha confiado en que los países adopten "algunas decisiones que supongan un cambio en el terreno de juego en términos prácticos".

"La situación de seguridad, dentro y fuera de la Unión Europea no nos permite ser vagos o generales o simplemente indicar buenas intenciones", ha avisado la jefa de la diplomacia europea durante su intervención en la reunión de dos días en Bruselas de los jefes de Estado Mayor de la Defensa de los Veintiocho, para discutir la puesta en práctica del pilar de defensa y seguridad de la nueva estrategia global de Política Exterior y Seguridad europea presentada en junio.

"Esto es un ejercicio que hacemos a 28", ha subrayado Mogherini, que ha rechazado que el refuerzo de la cooperación en defensa se haga "por el resultado del referéndum en Reino Unido" sobre su salida del bloque pese a ser el país que viene bloqueando desde hace años cualquier avance en defensa.

"Para nada, esto es resultado de la mayor necesidad de que haya resultados en seguridad y defensa para nuestros ciudadanos", ha avisado, recalcando que la primera preocupación de los ciudadanos europeos en la actualidad es su seguridad. "Cuanto más logremos hacer esto a 28 (...) más eficaz será nuestro trabajo", ha remachado.

Los ministros de Exteriores y de Defensa de los Veintiocho adoptarán el próximo lunes en una sesión conjunta en Bruselas "el plan de aplicación sobre seguridad y defensa" que les presentará Mogherini y que se espera que aprueben finalmente los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión en la cumbre de diciembre, dando las directrices a seguir en los próximos años para reforzar la política de seguridad y defensa en Europa.

La jefa de la diplomacia europea ha dejado claro que las decisiones en el sector de la defensa "más que en ninguno otro, están en manos de los Estados miembro" y ha apelado a un enfoque "muy pragmático pero muy ambicioso" porque, tras ocho años de crisis financiera, Europa necesita hacer "economías de escala" si quiere procurarse todo el espectro de tecnologías de defensa avanzadas.

Mogherini ha explicado que dicho plan que aprobarán los Veintiocho el lunes "debe definir un nuevo nivel de ambición que debe detallar los objetivos que la Unión Europea y los Estados miembros quieren lograr, incluido a través de la CSDP (la Política de Seguridad y Defensa Común europea), para aplicar la estrategia global" y ha propuesto "tres elementos" para el plan, que pasan por que la UE se centre en "la capacidad de reaccionar y responder a crisis" en su entorno, "consolidar las capacidades de los socios frágiles", principalmente del entorno vecino pero sin olvidar zonas como África, donde resulta "clave" que el bloque invierta en consolidar las capacidades de los países y, en tercer lugar, "proteger a la Unión y los ciudadanos de la Unión".

LA UE NO BUSCA EQUIPARSE PARA LA DEFENSA COLECTIVA

"No pensamos en la defensa colectiva", ha puntualizado la jefa de la diplomacia europea, en alusión a la tarea "principal" de la OTAN de proteger a sus países miembro. "Mi sugerencia es que nos centremos en las vías en que desde la Unión Europea, a través de nuestra acción externa, podemos contribuir a la protección de la Unión y sus ciudadanos", ha puntualizado, algo que incluye el refuerzo de la cooperación entre la UE y la OTAN en seguridad marítima, la ciberdefensa y para contrarrestar las amenazas híbridas.

Mogherini ha vuelto a dejar claro que la UE no busca equiparse "para la defensa colectiva" ni crear un Ejército europeo que "no está sobre la mesa" ni "duplicar" lo que hacen otros socios "relevantes", entre ellos la OTAN y la ONU, sino "apoyar a los Estados miembro en el desarrollo de una serie de fuerzas únicas" que luego podrán utilizar para operaciones de la UE, la OTAN, la ONU o a nivel nacional o dentro de "alianzas de distintos tipos".

La jefa de la diplomacia europea ha avanzado que propondrá a los Veintiocho "algunas acciones concretas que son necesarias" para un nivel de ambición "creíble", algo que pasa por "identificar las prioridades en el desarrollo de capacidades" y "profundizar la cooperación en defensa y proporcionar las capacidades requeridas juntos", así como "ajustar las estructuras" para planificar y llevar a cabo operaciones y "aumentar la solidaridad financiera" y "más flexibilidad" de los instrumentos financieros y por ello planteará "tener un abanico de opciones de financiación" para las misiones europeas y en términos generales para la Política de Seguridad y Defensa común.

Mogherini ha admitido "el problema" de la financiación para poner en marcha operaciones. El actual mecanismo Athena, un fondo intergubernamental, apenas cubre una mínima parte del gasto común para las operaciones militares.

LA COOPERACIÓN ESTRUCTURADA PERMANENTE REQUIERE MÁS REFLEXIÓN Mogherini ha reconocido que algunas ideas como avanzar en la cooperación estructurada permanente en defensa -que permitiría a grupos de países avanzar por su cuenta_, "quizá necesiten algo más de reflexión y opciones" y por tanto ha descartado que se decidan "ya la semana que viene o dentro de un mes", igual que sobre la posibilidad de contar con "una revisión anual coordinada en defensa" para garantizar que los Estados miembro aportan "juntos las capacidades requeridas".

"También podría haber opciones para superar las deficiencias en nuestras estructuras de planificación y dirección de las operaciones militares y civiles", ha remachado, dejando claro que no se trata de crear "grandes estructuras nuevas" o contar con "un cuartel tipo Shape", en alusión al cuartel militar de la OTAN, sino de mejorar las estructuras "existentes".

Y ha insistido en la necesidad de "estudiar" sobre herramientas de reacción rápida como los grupos de combate tácticos de la UE, que nunca han sido desplegados.