LA PAZ, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha amenazado a Chile con emprender acciones legales por lo que ha considerado un "uso abusivo" de las aguas del manantial Silala, compartido por ambos países, aumentando así la escalada de tensión bilateral.
"He instruido a la Dirección Estratégica de Reivindicación Marítima (Diremar) a que estudie las alternativas jurídicas para asumir la defensa de nuestras aguas del Silala ante las instancias internacionales competentes", ha dicho con motivo del Día del Mar.
El líder indígena ha denunciado el "uso abusivo y arbitrario" que hace Chile de las aguas del Silala. "Cada día, Chile se aprovecha ilegal y arteramente de ese recurso natural sin compensar ni un centavo. Esto no puede continuar", ha afirmado, según informa el diario local 'La Razón'.
El Silala nace en territorio boliviano pero abastece a Chile a través de una conducción artificial pactada, sin que La Paz reciba ninguna contraprestación por ello. Bolivia ha querido renegociar la situación del manantial pero Chile se niega.
Morales ha aprovechado para reiterar el llamamiento a Chile para desarrollar "un diálogo franco y sincero que permita trabajar juntos para cumplir los compromisos y ofrecimientos de negociar con Bolivia un acceso soberano al mar, que garantizará el bienestar de ambos pueblos".
"Chile debe comprender de una vez por todas que el negacianismo es el peor camino elegido. Negar la existencia de un problema no lo soluciona, sino más bien lo posterga y lo agrava innecesariamente. No queremos más enfrentamientos, no queremos mayores desencuentros", ha sostenido.
El líder boliviano ha explicado que, precisamente, su Gobierno acudió a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) con "la esperanza" de encontrar soluciones "que permitan resolver los temas pendientes de forma pacífica, en el marco de la verdadera integración de los pueblos".
"Esta es una causa que fue también la de nuestros abuelos y padres, pero que no queremos heredar a las futuras generaciones. Por tanto, no desfalleceremos nunca en nuestro objetivo de llegar a un entendimiento con Chile", ha recalcado.
RESPUESTA CHILENA
El ministro de Exteriores de Chile, Heraldo Muñoz, ha contestado que "Chile no acepta amenazas ni diálogo con condiciones". "El presidente boliviano ha hecho un discurso que llama a la confusión: por un lado habla de diálogo y por otro dice que va a estudiar una nueva demanda por el uso de las aguas del río Silala", ha criticado.
Muñoz ha advertido de que "Chile también puede iniciar acciones judiciales contra Bolivia en instancias internacionales". "Tenemos claridad en que es un río internacional de aguas continuas y nos asisten derechos importantes al respecto", ha aseverado.
El jefe de la diplomacia chilena ha insistido en que Chile "está a favor del diálogo", pero al mismo tiempo "está preparado para cualquier eventualidad". "Chile no va a aceptar una cesión territorial, que eso quede muy claro", ha enfatizado, de acuerdo con 'El Mercurio'.
CONFLICTO TERRITORIAL
Ambos países están enfrentados en la CIJ por un conflicto territorial que se remonta a 1879, cuando Bolivia perdió su salida al Pacífico en la guerra que mantuvo con Chile, que culminó con el Tratado de Paz y Amistad de 1904, sobre el derecho de libre tránsito de mercancías bolivianas hacia y desde puertos en este océano.
Chile asegura que con el acuerdo de paz --que fue ratificado por ambos parlamentos veinte años después-- se establecen las fronteras, también las marítimas, de las naciones combatientes, por lo que no hay lugar a ninguna disputa territorial.
Bolivia argumenta que el acuerdo de paz es "injusto, incumplido e impuesto" y ha rechazado la intangibilidad de los tratados internacionales, recordando que Estados Unidos se avino a superar el firmado en 1903 con Panamá.
En un intento por destrabar el conflicto bilateral, el Gobierno de Morales y el de la también entonces presidenta chilena Michelle Bachelet firmaron en 2006 una agenda de 13 puntos para iniciar las negociaciones sobre la salida marítima para Bolivia.
No obstante, el diálogo nunca llegó a iniciarse, más allá de las reuniones de trabajo, por lo que finalmente el 24 de abril de 2013 el Gobierno boliviano presentó una demanda en la CIJ para exigir su salida al mar a Chile.
Chile impugnó la competencia de La Haya, alegando que la cuestión ya había quedado resuelta en tratados bilaterales, pero la CIJ ha rechazado este argumento y se ha declarado competente para conocer el fondo del asunto.