LA PAZ, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha criticado este lunes la supuesta intención de Chile de "intimidar" a su vecino con las maniobras militares que sus Fuerzas Armadas realizarán la próxima semana en la frontera común, en medio de la disputa territorial en La Haya.
El Gobierno de Michelle Bachelet ha adelantado que entre el 8 y el 13 de noviembre su Ejército llevará a cabo unas prácticas militares en su frontera norte, que linda con Bolivia y Perú, en el marco del denominado Plan Halcón.
"Tal vez algunos grupos conservadores en Chile piensan que con esa clase de ejercicio van a intimidar a Perú y Bolivia, pero se equivocan", ha dicho Morales, afirmando que "esa clase de actos solo mellan la dignidad del pueblo chileno".
Morales ha considerado un "gran error" la iniciativa de La Moneda y ha confiado en que "no se trate de una amenaza" porque "no estamos en tiempos de invasión, sino de integración". "Los principios de intervencionismo y expansionismo tienen que terminar", ha sostenido.
El ministro de Exteriores de Chile, Heraldo Muñoz, ha respondido que "Chile no necesita intimidar a nadie". "Siempre hemos sido favorables al diálogo y lo hemos demostrado ofreciendo relaciones democráticas. Chile es muy claro en esta materia", ha dicho, de acuerdo con la prensa local.
Por su parte, el ministro de Interior chileno, Jorge Burgos, ha aclarado que las maniobras militares "son lo más normal que hay" y que, como en cualquier país del mundo, "forman parte de las actividades de aprestos de las Fuerzas Armadas".
DELITOS FRONTERIZOS
Por otro lado, los ministros chilenos han anunciado que este lunes han entregado "una nota diplomática" a la cónsul general de Bolivia en Santiago, Magdalena Cajías, "para expresar su preocupación en relación a hechos delictuales ocurridos en la frontera".
Muñoz ha asegurado que se han producido "acciones de bandidaje desde Bolivia en contra de trabajadores de mineras y trabajadores contratistas en una zona limítrofe de alrededor de 40 kilómetros, más bien centrados en el hito número 60".
"Estas acciones comenzaron en enero de 2012 y se han repetido e incrementado a través del tiempo. De hecho, el mes pasado hubo tres ataques, robos de vehículos y uso de armas de fuego con heridos", ha indicado la Cancillería en un comunicado
La Moneda ha reclamado al Gobierno de Morales "que se cumpla estrictamente el acuerdo que existe entre los Carabineros de Chile y la Policía Nacional de Bolivia para investigar y sancionar estos delitos" en la línea limítrofe.
Muñoz ha advertido de que, si bien "Chile quiere las relaciones más normales con sus vecinos, no va a tolerar acciones que vulneren, ya sea la integridad personal o la propiedad en su territorio nacional y actuará con todo el rigor necesario".
CONFLICTO TERRITORIAL
El conflicto territorial se remonta a 1879, cuando Bolivia perdió su salida al Pacífico en la guerra que mantuvo con Chile, que culminó con el Tratado de Paz y Amistad de 1904, sobre el derecho de libre tránsito de mercancías bolivianas hacia y desde puertos en este océano.
Chile asegura que con el acuerdo de paz --que fue ratificado por ambos parlamentos veinte años después-- se establecen las fronteras, también las marítimas, de las naciones combatientes, por lo que no hay lugar a ninguna disputa territorial.
Bolivia argumenta que el acuerdo de paz es "injusto, incumplido e impuesto" y ha rechazado la intangibilidad de los tratados internacionales, recordando que Estados Unidos se avino a superar el firmado en 1903 con Panamá.
En un intento por destrabar el conflicto bilateral, el Gobierno de Morales y el de la también entonces presidenta chilena firmaron en 2006 una agenda de 13 puntos para iniciar las negociaciones sobre la salida marítima para Bolivia.
No obstante, el diálogo nunca llegó a iniciarse, más allá de las reuniones de trabajo, por lo que finalmente el 24 de abril de 2013 el Gobierno boliviano presentó una demanda en la CIJ para exigir su salida al mar a Chile.
Chile impugnó el año pasado la competencia de La Haya, alegando que la cuestión ya había quedado resuelta en tratados bilaterales, pero la CIJ ha rechazado este argumento y el pasado 24 de septiembre se declaró competente para conocer el fondo del asunto.