ROMA, 3 Abr. (Reuters/EP) -
La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) ha advertido este lunes de que cualquier acuerdo político entre las autoridades europeas y de Libia para intentar frenar la inmigración es una "ficción peligrosa" que provocaría la proliferación de las mafias en Libia y la creación de centros de detención donde serían víctimas de abusos.
Roma firmó en febrero un memorándum de entendimiento con el Gobierno libio reconocido por la comunidad internacional y sede en Trípoli que compromete formación, material y recursos económicos para combatir a las mafias de tráfico de seres humanos. El acuerdo cuenta con el respaldo de la UE.
Sin embargo, el director general de MSF, Arjan Hehenkamp, quien además dirige la misión de MSF en Libia, ha advertido de que la idea de que haya centros de retención en condiciones adecuadas en suelo libio "es sencillamente imposible".
"Pensar de otro modo es una ficción peligrosa", ha asegurado Hehenkamp en declaraciones a la prensa desde Roma, adonde ha llegado procedente de Libia. Según Hehenkamp, quien crea que Libia es un lugar seguro para los migrantes, "está viviendo voluntariamente sobre hechos alternativos o en un mundo de fantasía". "Es sencillamente imposible pensar que ahora mismo Libia pueda ser considerada como parte de la solución", ha apostillado.
Hehenkamp ha explicado que siete de los campamentos levantados en Trípoli y sus alrededores para el internamiento de los migrantes están controladas por milicias implicadas en acciones violentas y abusos.
En estos campamentos existe "un sistema de abuso y extorsión", según Hehenkamp. Los migrantes tienen que pagar a las mafias para intentar cruzar el Mediterráneo y corren el riesgo de ser vendidos como mano de obra esclava, ha advertido.
El ministro del Interior italiano, Marco Minniti, ha lanzado un llamamiento al respeto de los Derechos Humanos y ha argumentado que en estos campamentos deberían contar con las agencias de la ONU.
La UE ha formado hasta ahora a 90 miembros de la nueva Guardia Costera libia e Italia ha prometido la donación de diez patrulleras. La primera llegará a mediados de mayo.
En lo que va de año se han incrementado un 30 por ciento las llegadas de inmigrantes a Italia, hasta los 24.000. Además, se estima que unas 600 personas han fallecido en la travesía.