MADRID 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
Médicos Sin Fronteras (MSF) ha advertido este viernes de que han aumentado los bombardeos contra los servicios médicos en las regiones sirias de Idlib y Hama en los últimos diez días y ha reclamado que cesen los ataques.
El hospital Hama Central o Sham fue alcanzado por un ataque aéreo el martes pasado y ha quedado inutilizable, aunque no se registraron víctimas mortales. Se trataba de la única instalación médica del noroeste de Siria que aún podía realizar cirugías vitales, según ha relatado la organización.
"Esperábamos que antes o después se produjese un nuevo ataque", ha explicado del director del hospital Hama Central. "Desde que abrimos en 2012, este hospital ha sido golpeado por más de diez ataques aéreos en diferentes momentos del conflicto", ha añadido.
La ONG ha señalado que tres hospitales de la zona también fueron atacados la semana pasada y quedaron fuera de funcionamiento, y que otros han cerrado recientemente por el miedo a los bombardeos. MSF ha advertido de que la capacidad para brindar asistencia sanitaria en medio del conflicto que asola el país se ha reducido drásticamente.
"El miedo está causando que los hospitales cierren o reduzcan los servicios, y el impacto de esto recaerá en todos los enfermos, en los heridos, en las mujeres embarazadas y en todos los que necesitan atención médica", ha alertado el director de operaciones de MSF, Brice de le Vigne.
Los responsables de seis centros de salud y hospitales operativos en el territorio han indicado que recibieron un total de 241 heridos evacuados de las instalaciones inhabilitadas entre el 20 y el 27 de septiembre, por lo que están desbordados, y han expresado su temor a ser alcanzados por los ataques.
De le Vigne ha afirmado que los bombardeos han producido un número significativo de heridos, de los cuales 129 son mujeres y niños menores de 15 años y ha señalado de que "es evidente e indignante que, en este momento, los hospitales no están a salvo de los bombardeos en Idlib".
MSF ha recordado que, según el Derecho Internacional Humanitario, cualquier persona que necesite atención médica, ya sea combatiente o civil, debe ser atendida y ha exigido a las partes involucradas en el conflicto que cumplan con los compromisos asumidos en Naciones Unidas y no ataquen las instalaciones médicas.