La ONG insiste en la crítica situación de los civiles, sobre todo en Darfur, donde "están matando a tiros" a quienes intentan escapar
MADRID, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
Médicos sin Fronteras alerta este viernes de que la violencia generalizada y las dificultades burocráticas están impidiendo la llegada regular de ayuda humanitaria a las zonas más afectadas por la guerra entre el Ejército sudanés y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), especialmente en la capital, Jartum, y la región de Darfur.
"La gente muere mientras el sistema de salud del país se tambalea bajo el peso de unas necesidades abrumadoras", alerta Jean Nicolas Armstrong Dangelser, coordinador de Emergencias de MSF en Sudán, quien denuncia "niveles de violencia espeluznantes" por parte de Ejército y paramilitares.
A ello se añaden las enormes dificultades a las que se enfrentan los equipos de MSF para atravesar los innumerables controles en las carreteras del país, como lamenta el doctor Javid Abdelomoneim, jefe del equipo médico de MSF que acabó bloqueado cuando intentaba efectuar un reparto de ayuda médica de emergencia desde Port Sudán, donde MSF tiene su base de operaciones.
"¿Por qué, después de dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete conversaciones con las autoridades, nuestros permisos para viajar de vuelta a Jartum y a los estados del río Nilo fueron rechazados?", ha lamentado el doctor Abdelomoneim. "Han pasado semanas y todo mi equipo sigue sentado en Port Sudán sin poder hacer nada", ha añadido.
MSF acusa a las autoridades de impedir "repetidamente" la circulación de personal humanitario y médico y de suministros, de rechazar permisos de viaje "solicitados a tiempo y con documentación en regla" sin que en algún momento "hayan dado claros motivos" e incluso denuncia que, en ocasiones, "el personal de MSF fue acosado, amenazado o detenido".
A pesar de las reiteradas solicitudes y peticiones, las autoridades sudanesas han expedido muchos menos visados de los que MSF necesita para traer personal suficiente para responder a las inmensas necesidades de la población sudanesa en un proceso "incoherente, poco fiable y sin garantía alguna".
"Aunque no está claro si estas acciones son un intento deliberado de restringir la ayuda humanitaria, las consecuencias para la población son las mismas que si lo fueran: un acceso reducido a la asistencia sanitaria en el momento en que esta resulta más urgente", lamenta la organización.
La ONG insiste por enésima vez en la "situación desesperada" a la que se enfrentan los civiles. Los pacientes que huyeron de Darfur Occidental a Chad, donde fueron atendidos por MSF, describieron una situación terrible en El Geneina, la capital del estado, donde "están matando a tiros" a la gente que intenta abandonar la ciudad.