MADRID 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
Médicos Sin Fronteras (MSF) ha denunciado este lunes que los líderes huthis siguen sin darle permiso para entregar suministros médicos esenciales a dos hospitales de la sitiada ciudad de Taiz, en el sur de Yemen.
Este lunes, los camiones de la ONG han sido detenidos de nuevo en los puestos de control huthis y se les ha negado el acceso a la zona. "Los hospitales en esta zona sitiada están atendiendo a gran número de pacientes con heridas de guerra", ha contado Karline Kleijer, directora de Emergencias de MSF en Yemen, tras regresar del país.
"Sin embargo, se nos ha impedido la entrega de suministros médicos para ayudar al personal a proporcionar cirugías de emergencia", ha señalado. "Es muy frustrante que, después de semanas de negociaciones, no hemos podido lograr ningún progreso en convencer a los dirigentes de Ansarulá de la necesidad de proporcionar asistencia médica neutral para las víctimas de los combates que se están produciendo en este enclave, a pesar del continuo apoyo que estamos proporcionando a las instalaciones de salud en las áreas bajo control huthi", ha explicado.
Los residentes del enclave de Taiz han contado a MSF las crecientes restricciones que están sufriendo para conseguir agua, combustible y alimentos. En este sentido, la ONG ha asegurado que los precios en la zona sitiada han aumentado de manera espectacular y los ciudadanos luchan desesperadamente por encontrar agua potable.
"Los yemeníes que habitan en las zonas más densamente pobladas de Taiz viven con el temor constante a recibir un disparo por parte de algún francotirador, a convertirse en víctimas de una bala perdida o a sufrir los efectos de los bombardeos con mortero, que están siendo utilizados de manera indiscriminada por ambas partes del conflicto", ha relatado la ONG.
MSF ha indicado que los ataques aéreos golpean la ciudad de Taiz a diario y la gente está afrontando dificultades para llegar a las clínicas y hospitales. "La gente a menudo busca atención médica de enfermeras o doctores con los que han hecho amistad en sus domicilios particulares", ha señalado.
La ONG ha considerado que el embargo de armas a Yemen, que se ha convertido en un bloqueo general de facto puesto en marcha por la coalición liderada por Arabia Saudí y la ONU, ha provocado una escasez crítica de alimentos y de combustible en todo el país. "Lo poco que puede encontrarse a día de hoy en el mercado, sólo está disponible a precios exorbitantes", ha alertado MSF.
"Una gran parte de la población de Taiz se encuentra desplazada dentro de la ciudad", ha señalado Kleijer. "Están luchando cada día por su supervivencia y para conseguir alimentos y agua. Los precios están por las nubes y la sensación de inseguridad es perfectamente palpable", ha añadido.
Taiz, que hasta hace poco tenía 20 hospitales para atender a una población de más de 600.000 habitantes, solo tiene seis centros operativos en la actualidad. Los centros, según sus estimaciones, carecen de personal sanitario básico, de combustible y de medicamentos esenciales, y se encuentran abrumados por el alto número de heridos que reciben cada día.
"La situación en Taiz es muy preocupante, pero si no se llevan a cabo esfuerzos para proteger a los civiles de la violencia y para asegurar el acceso a los servicios básicos, incluidos los servicios de salud, todavía puede empeorar más", ha advertido Kleijer.