La organización utiliza el análisis forense aplicado para hallar a los responsables de los bombardeos
MADRID, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
Al menos un centenar de instalaciones médicas apoyadas por Médicos Sin Fronteras (MSF) han sido bombardeadas durante los dos últimos años, según ha denunciado la organización, que ha destacado la importancia de señalar a los responsables para acabar cuanto antes con este tipo de agresiones.
La gran mayoría de los ataques han tenido lugar en Siria, Yemen, Afganistán, Ucrania y Sudán, según ha informado MSF, que estima que la protección de las instalaciones civiles en los países que se encuentran inmersos en conflictos armados podrían salvar miles de vidas.
La organización ha recurrido en reiteradas ocasiones a la Comisión Internacional Humanitaria de Encuesta (CIHE) para realizar una serie de investigaciones al respecto tras el bombardeo llevado a cabo por el Ejército estadounidense contra el hospital de MSF en Kunduz, Afganistán.
La CIHE utiliza el análisis forense aplicado para reconstruir los ataques y determinar quién es el responsable. En febrero de 2016, el hospital de Maarat al Numan, en la provincia siria de Idlib, fue alcanzado por varios proyectiles, que provocaron la muerte de 25 personas.
Tras el ataque, el presidente de la organización en Francia, Mego Terzian, señaló a los gobiernos de Siria y Rusia como principales responsables en base a los resultados obtenidos por el equipo de la organización Forensic Architecture, que había analizado vídeos y fotografías para reconstruir el bombardeo.
MSF, que exige que los centros afectados sean reparados y reconstruidos por los gobiernos responsables de los ataques, ha denunciado la falta de voluntad política a nivel internacional a la hora de proteger este tipo de instalaciones.