LONDRES, 17 Jun. (Reuters/EP) -
Los equipos médicos locales y las organizaciones de ayuda que trabajan en Yemen están abrumadas por la magnitud de la violencia que sacude al país, lo que ha provocado que el sistema de seguridad social esté al borde del colapso, ha denunciado este miércoles Médicos Sin Fronteras (MSF).
En Yemen, el 80 por ciento de su población necesita ayuda de forma urgente y existe una constante amenaza de brotes de nuevas enfermedades, según el último informe de Naciones Unidas. Los equipos médicos locales trabajan muy duro pero necesitan medicamentos y material sanitario, además de combustible para hacer funcionar sus generadores. En este contexto, muchos hospitales se han visto obligados a cerrar sus puertas.
"La situación está superando nuestras capacidades y las necesidades son más grandes que las que puede hacer frente el sistema de ayuda internacional", ha alertado el jefe de MSF para la misión en Yemen, Andre Heller Perache. "La escalada de la crisis está creciendo y se espera que empeore todavía más con el tiempo", ha agregado.
El Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) ha denunciado en su nuevo informe que desde la última escalada de violencia en marzo, han muerto al menos 279 niños y otros 402 han resultado heridos, cuatro veces más que durante todo el año 2014.
EL PUEBLO YEMENÍ UNIDO
"Existe un malestar general que impregna cada rincón del país", ha lamentado Heller Perache. Sin embargo ha relatado que el pueblo yemení sigue trabajando junto a pesar de las dificultades. "Muchos hospitales privados están atendiendo a los heridos desinteresadamente", ha agregado.
"Todo el mundo está realmente unido y tratando de ayudar. Es muy inspirador pero la cantidad de trabajo y la cantidad de tensión sobre la gente es enorme", ha afirmado el coordinador de MSF. Heller Perache ha dicho además que la violencia incesante y las restricciones sobre la economía han convertido a Yemen de un estado lento a uno que en estos momentos se encuentra al borde del colapso.
"Puedes dar comida a un grupo de personas que necesitan alimentos, pero ellos necesitan mucho más que eso. Necesitan electricidad para sus casas, sus hijos quieren ir al colegio y los adultos tienen proseguir con sus negocios", ha relatado.
La coalición internacional liderada por Arabia Saudí ha llevado a cabo ataques aéreos contra las posiciones de los rebeldes huthis en Yemen durante casi tres meses con la intención de restablecer al presidente exiliado, Abdo Rabbu Mansur Hadi y evitar el avance de los rebeldes chiíes. La alianza saudí ha impuesto un fuerte bloqueo sobre las importaciones de combustible, alimentos y medicinas para evitar que las fuerzas rebeldes se abastezcan con armas.