MSF urge a Grecia a acabar con el confinamiento de migrantes por el coronavirus: "No tiene justificación"

Un trabajador de MSF atiende a un niño en una clínica pediátrica de Moria (Grecia)
Un trabajador de MSF atiende a un niño en una clínica pediátrica de Moria (Grecia) - ANNA PANTELIA / MSF - Archivo
Publicado: lunes, 20 julio 2020 14:07

La ONG denuncia que los campos para migrantes son "pozos aún más peligrosos" con la COVID-19

MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -

Médicos Sin Fronteras (MSF) ha urgido este lunes a las autoridades griegas a poner fin al confinamiento de los inmigrantes y solicitantes de asilo que se encuentran recluidos en asentamientos "superpoblados" desde hace cinco meses, por considerar que "no tiene justificación alguna desde el punto de vista de la salud pública".

La ONG ha recordado que cuando la COVID-19 llegó a Grecia había más de 30.000 migrantes en los centros de recepción de las islas griegas, donde "las condiciones de vida, al igual que ahora, eran pésimas", puesto que "no disponían de acceso a la atención médica más necesaria ni a los servicios más básicos".

En marzo, el Gobierno griego anunció una batería de medidas para frenar el contagio del virus que "supusieron que todas estas personas, entre las cuales hay un alto porcentaje de niños, se vieran desde entonces obligadas a permanecer en estos lugares superpoblados y carentes de las más esenciales medidas de higiene". "Y lo que es peor", ha añadido MSF, "sin posibilidad de escape frente a las peligrosas amenazas que forman parte de su vida diaria".

Así, "a día de hoy llevan cinco meses encerrados en condiciones extremas, lo cual está causando un profundo deterioro de su salud", ha alertado la ONG. "Las restricciones de movimiento para migrantes y refugiados en el campo han afectado drásticamente a la salud mental de mis pacientes", ha confirmado Greg Kavarnos, psicólogo de MSF en Moria.

Kavarnos ha instado a ponerse en el lugar de esos migrantes. "Cualquiera de nosotros sabe lo irritables, tristes y estresados que muchos hemos llegado a estar durante el periodo de confinamiento, así que resulta sencillo imaginar cómo deben estar sintiéndose todas estas personas que han sufrido experiencias terriblemente traumáticas", ha indicado.

Mohtar, el padre de uno de los niños atendidos por MSF en su clínica de salud mental de la isla griega de Lesbos, ha señalado que "las tensiones en el campo han aumentado en los últimos meses y hay mucha más violencia desde que se produjo el cierre".

"Lo peor es que ni siquiera los niños pueden escapar ya de esta situación", ha lamentado Mohtar. "Antes, lo único que podía hacer para ayudar a mi hijo era alejarlo de Moria --salir a caminar o a nadar en el mar, intentar encontrar un lugar tranquilo--. Ahora ya no. Estamos atrapados", ha ilustrado.

UNA MEDIDA "DISCRIMINATORIA"

Médicos Sin Fronteras considera que, si bien estas medidas preventivas fueron "lógicas durante un tiempo", ahora que "la vida ha vuelto a la normalidad en las islas tanto para la población local como para los turistas (...) se trata de una medida absolutamente discriminatoria que se amplía de nuevo cada dos semanas", la última vez hasta el 2 de agosto.

Para MSF, "en la fase actual de la epidemia de COVID-19 en la que se encuentra Grecia, esta medida no tiene justificación alguna desde el punto de vista de la salud pública". "Es más: resulta discriminatoria y afecta a personas que no representan riesgo alguno", ha apostillado.

En su opinión, solo "contribuye a la estigmatización de los migrantes y solicitantes de asilo, al tiempo que les pone en más en riesgo" porque el confinamiento "ha reducido drásticamente su ya de por sí limitado acceso a los servicios básicos y a la atención médica".

"MSF no puede permanecer en silencio ante lo que resulta una medida evidentemente discriminatoria por parte del Gobierno griego", ha dicho la organización humanitaria en un comunicado.

Por ello, ha pedido no usar la COVID-19 "como pretexto para detener a migrantes y refugiados dentro de los campos", reiterando su llamamiento a evacuar a estas personas, especialmente a las más vulnerables, para llevarlas a "alojamientos seguros que reúnan unas condiciones de vida mínimas".

"Las condiciones de vida en estos campos no son aceptables ni siquiera en condiciones normales. Sin embargo, ahora, debido a esta decisión arbitraria del Gobierno griego, se han convertido en pozos aún más peligrosos de violencia, enfermedad y miseria", ha denunciado MSF.

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