MADRID 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
La actriz estadounidense Debbie Reynolds, madre de la recientemente fallecida Carrie Fisher, ha muerto este miércoles, 28 de diciembre, después de haber sido hospitalizada tras sufrir una posible apoplejía, según ha informado el portal especializado en famosos TMZ.
Una unidad móvil de emergencias se había desplazado horas antes hasta la vivienda de su hijo, Todd Fisher, ubicada en Beverly Hills en la que se encontraba Reynolds cuando comenzó a encontrarse mal. La llamada a emergencias se registró pasadas las 13.00 horas (las 22.00, hora peninsular española).
El propio hijo de Reynolds ha confirmado el fallecimiento de la actriz, de 84 años, que se encontraba organizando la celebración del funeral de Carrie Fisher, que falleció el martes a los 60 años tras sufrir un infarto en un avión.