MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un palestino que resultó herido el jueves tras ser tiroteado por las fuerzas israelíes sen el campamento de refugiados de Al Arrub, al norte de la ciudad cisjordana de Hebrón, ha fallecido este viernes a causa de la gravedad de sus heridas.
Fuentes médicas citadas por la agencia palestina de noticias WAFA han indicado que el fallecido, Mohamad Yauabré, de 22 años, recibió el jueves un disparo en la cabeza. El hombre ha muerto en el Hospital Al Ahliu.
El Ejército israelí ha indicado que los militares entraron en el campamento tras identificar a varios palestinos enmascarados que lanzaron piedras contra motoristas en la cercana Ruta 60, la principal autovía que cruza Cisjordania de norte a sur.
Así, ha manifestado en declaraciones al diario 'The Times of Israel' que "durante la persecución estallaron disturbios violentos en los que hombres enmascarados lanzaron piedras y bloques de hormigón desde tejados contra las tropas, poniendo en peligro sus vidas".
Por ello, ha explicado que los militares respondieron a través del empleo de "medios antidisturbios y disparos de Ruger", antes de confirmar que al menos una persona fue alcanzada por los disparos.
Por otra parte, el Ministerio de Sanidad palestino ha resaltado en su cuenta en la red social Facebook que a primera hora de este viernes han resultado heridos dos palestinos tras ser tiroteados por "colonos" cerca de la aldea de Qusra, en el norte de Cisjordania.
Los incidentes llegan después de una redada llevada a cabo el miércoles por el Ejército israelí en Nablús que se saldó con al menos once palestinos muertos y cerca de un centenar de heridos, en medio del repunte de las tensiones en la zona.
Tras ello, el enviado de Naciones Unidas para el proceso de paz en Oriente Próximo, Tor Wennesland, hizo hincapié que está manteniendo contactos "con las partes implicadas" para intentar "rebajar las tensiones", al tiempo que pidió "a todas las partes" que "eviten pasos que puedan empeorar una situación que ya es volátil".
Las tensiones en la zona han repuntado durante los últimos meses, lo que ha hecho saltar las alarmas a nivel internacional. La escalada más reciente tuvo lugar a finales de enero, cuando una decena de palestinos murió por disparos de las fuerzas israelíes en una redada en un campo de refugiados en Yenín. Tras ello, siete israelíes murieron en un atentado en el asentamiento de Neve Yaakov.