BAGDAD, 22 Jul. (Reuters/EP) -
Al menos 32 personas han muerto este martes en varios atentados perpetrados en distintos puntos de Irak, el más sangriento de los cuales ha tenido lugar en un barrio chií de la capital, Bagdad.
Un total de 16 personas han muerto y otras 48 han resultado heridas a causa de la explosión de un coche bomba en el barrio de Nuevo Bagdad, ubicado en el noreste de la localidad. Asimismo, otras dos personas han muerto en un ataque en Zafaraniya, otro barrio mayoritariamente chií de la capital.
Además, seis soldados y policías han muerto en un atentado suicida contra un puesto de control en la ciudad de Tarmiya, situada unos 25 kilómetros al norte de Bagdad, según fuentes médicas y policiales.
A estos ataques hay que sumar otro con coche bomba en una calle comercial de la localidad de Mandali, de mayoría kurda chií y situada 100 kilómetros al norte de la capital, que se ha saldado con la muerte de ocho personas y 16 heridos.
Por el momento ningún grupo ha reclamado la autoría de estos ataques, si bien la formación yihadista Estado Islámico ha asegurado estar detrás de la inmensa mayoría de los atentados perpetrados en los últimos meses en el país.
ATAQUE CON MORTEROS EN FALUYA
Por otra parte, al menos nueve personas han muerto, entre ellas un niño, y otras doce han resultado heridas a causa de un ataque con morteros en la localidad de Faluya, ubicada en la provincia de Anbar (oeste), según ha informado el portal de noticias Iraqi News.
El Gobierno del primer ministro, Haider al Abadi, está intentando recuperar parte del terreno perdido ante la formación yihadista en la provincia de Anbar, después de que se hiciera en mayo con el control de la capital, Ramadi.
Las fuerzas iraquíes están recibiendo el respaldo de una coalición internacional encabezada por Estados Unidos que ha lanzado ataques aéreos contra los yihadistas desde hace casi un año.
Faluya, ubicada unos 40 kilómetros al norte de la capital, Bagdad, fue un centro de oposición armada al Gobierno de Nuri al Maliki antes incluso de que el Estado Islámico lanzara su campaña relámpago en junio de 2014, haciéndose con gran parte de la zona noroeste del país.