MADRID 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
Al menos 39 civiles, entre ellos catorce niños, han muerto en los últimos dos días a causa de disparos de proyectiles por parte de los grupos rebeldes, en el marco de los fuertes enfrentamientos con las fuerzas gubernamentales en la localidad de Alepo.
Según las informaciones del Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Londres y una amplia red de informantes en el país árabe, los ataques rebeldes han dejado al menos 250 civiles heridos, por lo que no se descarta que ascienda el número de víctimas mortales.
Estos ataques se han saldado además con la muerte de 55 miembros de las fuerzas gubernamentales y los grupos que las apoyan, entre ellos catorce integrantes del partido-milicia chií libanés Hezbolá, que no se ha pronunciado por el momento.
Los ataques son parte de la mayor ofensiva por parte de los grupos rebeldes e islamistas, entre ellos el Frente Fatá al Sham --antiguamente Frente al Nusra--, para intentar romper el cerco impuesto por el Ejército a los barrios que controlan en el este de la ciudad.
Entre las facciones implicadas en la ofensiva figuran brigadas del Ejército Libre Sirio (ELS) y Jaish al Fatá, una alianza de facciones islamistas, según indicaron el viernes fuentes rebeldes.
El organismo no ha facilitado por el momento un balance de víctimas por los ataques del Ejército, que ha bombardeado el este de la ciudad, especialmente los barrios de Bustan al Qasr y Al Miasar.
Alepo, la segunda ciudad más importante del país, se encuentra dividida en sectores controlados por las fuerzas gubernamentales y por diversos grupos rebeldes.
Unas 275.000 personas estarían atrapadas en el este de Alepo, rodeadas por las fuerzas gubernamentales y con serios problemas de abastecimiento tanto de alimentos como de medicamentos.