La junta decreta tres días de luto tras el ataque, el más mortífero desde el golpe de Estado de julio
MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
Alrededor de 30 militares nigerinos murieron el lunes en un ataque perpetrado por supuestos yihadistas en la región de Tahoua (oeste), cerca de la frontera con Malí, según ha confirmado la junta militar, en el que supone el atentado más mortífero en el país africano desde el golpe de Estado de finales de julio.
El Ministerio de Defensa nigerino ha indicado que 29 militares murieron en el ataque, ejecutado con explosivos y coches bomba, antes de agregar que "varias decenas de terroristas" murieron durante los combates, según ha recogido el diario nigerino 'Le Sahel'.
Así, ha especificado que el ataque fue perpetrado contra "un destacamento" del Ejército nigerino que estaba en proceso de retirada tras "una operación" contra el grupo yihadista Estado Islámico en el Gran Sáhara (ISGS) --ahora Estado Islámico Sahel-- cerca de la frontera con Malí.
"Esta operación ha logrado resultados significados que se han traducido en la neutralización de muchos terroristas y en la destrucción de puntos logísticos", ha destacado, antes de lamentar que el atentado haya causado "la pérdida de muchos soldados valientes".
En este sentido, ha manifestado que los combates se saldaron además con la destrucción de 15 motocicletas utilizadas por los atacantes, así como con la incautación de "una importante cantidad de armas y municiones".
"Se interceptaron comunicaciones de los terroristas durante su repliegue, lo que permitió determinar que los criminales contaron con apoyo exterior", ha detallado, antes de recalcar que las autoridades seguirán trabajando para "garantizar al seguridad de personas y bienes en todo el territorio nacional pese a las operaciones de desestabilización orquestadas por ciertas potencias extranjeras, con la complicidad de traidores nigerinos".
"Reafirmamos nuestro compromiso inquebrantable con la salvaguardia de la patria. El sacrificio en combate de estos soldados por la defensa de nuestro país no será en vano y será fuente de orgullo y una motivación adicional", ha dicho.
La junta ha declarado tres días de luto nacional tras el ataque, que llega menos de una semana después de otro atentado en la región de Tillabéri, también cerca de la frontera con Malí, que se saldó con la muerte de doce militares y cerca de un centenar de yihadistas.
En los últimos años, las regiones de Tillabéri y Tahoua, ubicadas en la zona de las tres fronteras --con Malí y Burkina Faso-- y en la que operan las ramas de Al Qaeda y Estado Islámico en el Sahel, ha sufrido un aumento de la inseguridad, con ataques contra militares y población civil, situación que se suma a una nueva crisis política tras el golpe de Estado del 26 de julio. Asimismo, el país hace frente a la amenaza de Boko Haram y su escisión, Estado Islámico en África Occidental (ISWA) en la región de Diffa, situada en la cuenca del lago Chad.