SIRTE (LIBIA), 26 (Reuters/EP)
Al menos cinco soldados de las fuerzas de Libia han muerto y 18 han resultado heridos cuando intentaban arrebatar a Estado Islámico la última franja de su baluarte en Sirte, ha informado un portavoz del hospital de Misrata, Akran Gliwan.
Desde que comenzaron su campaña para reconquistar la ciudad en mayo, las fuerzas de Libia de la ciudad de Misrata, con el apoyo de las fuerzas aéreas estadounidenses, han conseguido tomar casi toda la ciudad de Sirte a excepción de una decena de casas cerca del paseo marítimo que da al Mediterráneo.
Las fuerzas de Libia sufrieron bajas cuando intentaban acabar con los miembros de Estado Islámico que se encontraban en estos edificios. y en su ataque utilizaron tanques y maquinaria pesada, según ha afirmado un reportero de Reuters desde la escena.
De igual modo, los elementos afines al Gobierno libio han intentado reducir el número de víctimas entre los soldados, los civiles y cautivos atrapados por las milicias según han ido avanzando en la batalla. Mientras, los miembros de Estado Islámico han defendido sus posiciones utilizando francotiradores, túneles y explosivos ocultos.
Las fuerzas de Misrata han tenido que hacer frente a dos terroristas suicida. Uno de los cuales utilizó un cinturón de explosivos y el otro granadas, según han publicado en sus cuentas de redes sociales. También, "una mujer miembro de Estado Islámico ha traicionado a nuestras fuerzas y nos ha disparado cuando intentábamos ofrecerle un paso seguro", han añadido. No obstante, las brigadas de Misrata han asegurado que han podido mantener el control de las casas en distrito de Ghiza Bahriya, en conflicto.
Estado Islámico se hizo con el control de la ciudad de Sirte a principios de este año y se fue expandiendo hasta cubrir una zona de 250 kilómetros cuadrados a partir de la costa. Desde principios de agosto, Estados Unidos ha llevado a cabo al menos 420 ataques aéreos para recuperar la ciudad.
La pérdida de Sirte dejaría a Estado Islámico sin ningún territorio en este país del norte de África. Sin embargo, las autoridades temen que las insurgencias reaparezcan en el sur y el oeste de Sirte como consecuencia de los milicianos que escaparon durante los inicios de la campaña para arrebatarle la ciudad a Estado Islámico.