MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
Al menos cuatro civiles murieron en un ataque ejecutado en la noche del martes por presuntos miembros de la milicia Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF) en la provincia de Beni, situada en el este de República Democrática del Congo (RDC), según han confirmado este miércoles las autoridades.
El presidente de la sociedad civil local, Bravo Vukulu, ha detallado que el ataque fue ejecutado contra la aldea de Eringeti, situada unos 60 kilómetros al noreste de la capital provincial, tal y como ha recogido la emisora congoleña Radio Okapi.
Así, ha indicado que los presuntos miembros de las ADF irrumpieron en la aldea en torno a las 21.00 horas (hora local) y mataron a cuatro civiles, entre ellos tres mujeres, mientras que un niño de menos de tres años "ha sido dado por desaparecido".
"Esta situación ha recreado pánico entre la población local y todas las actividades se encuentran paralizadas en este momento", ha dicho, antes de confirmar que en la zona se encuentra desplegado el Ejército para intentar localizar a los atacantes.
Vukulu ha destacado que "el Ejército se ha hecho con el control de numerosos campamentos de las ADF, lo que ha desestabilizado al enemigo, que busca romper la unión entre la población y los militares".
La milicia de las ADF actúa en RDC desde la década de los noventa y, a pesar de las reiteradas ofensivas lanzadas contra ella, sigue generando violencia en la zona. Está considerado uno de los grupos armados más peligrosos de las varias decenas que operan en el país africano.
Durante 2019 surgieron informaciones en torno a posibles contactos entre las ADF y el grupo yihadista Estado Islámico, especialmente después de que este grupo reclamara en abril la autoría del que sería su primer ataque en el país africano, así como la formación de una nueva rama en el continente, llamada Provincia de África Central.
Varios grupos armados controlan partes del este de RDC pese a que la guerra de 1998-2003 concluyera formalmente. El conflicto causó millones de muertos, la mayoría víctimas del hambre y las enfermedades.
La violencia armada ha complicado la lucha contra el brote de ébola que se declaró en el este del país --con Kivu Norte como uno de los epicentros-- en agosto de 2018. Desde entonces se han registrado ataques contra instalaciones médicas y personal sanitario.