MADRID 23 Nov. (EUROPA PRESS) -
Al menos diez personas han muerto este martes en Yemen en el marco del reinicio de los combates tras el fin el lunes del alto el fuego pactado entre las partes en conflicto.
Según las informaciones del portal yemení de noticias Al Taghir, los enfrentamientos han tenido lugar en los alrededores de Taiz y en la provincia de Dhale.
Asimismo, al menos una persona ha muerto y otras siete han resultado heridas a causa del impacto en la localidad saudí de Najran de un proyectil disparado por los rebeldes huthis.
El diario local 'Saudi Gazette' ha detallado que la víctima mortal es un ciudadano yemení. Por el momento se desconocen las identidades de los heridos.
La coalición liderada por Arabia Saudí en apoyo al Gobierno yemení dio el lunes por finalizada la tregua de 48 horas que había decretado, argumentando repetidas violaciones de la misma por parte de los huthis y sus aliados.
Antes del anuncio de que la tregua no iba a renovarse, residentes de la capital, Saná, denunciaron que aviones de combate de la coalición habían realizado ataques aéreos contra objetivos militares en la ciudad.
Saná está controlada por los rebeldes del movimiento huthi, que siguen dominando amplias zonas del territorio a pesar de los casi 20 meses de ofensiva militar liderada por la coalición que encabeza Arabia Saudí para respaldar al Gobierno yemení.
EL CONFLICTO
Arabia Saudí lidera una coalición regional para apoyar al Gobierno de Hadi, mientras que en el bando contrario se sitúan los rebeldes huthis y las fuerzas leales a Salé, que cuentan con el respaldo de Irán.
La guerra en Yemen ha dejado un balance de más de 7.000 muertos y 36.800 heridos, según un balance publicado a mediados de noviembre por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En su comunicado, el organismo cifró en 7.070 los muertos y en 36.818 los heridos, agregando que 2,1 millones de personas se encuentran desplazadas en el interior del país a causa del conflicto.
Asimismo, apuntó que más de 21 millones de personas tienen necesidad urgente de acceder a servicios sanitarios, denunciando los graves daños causados por la guerra al mismo.
El conflicto ha destrozado la inmensa mayoría de las infraestructuras de Yemen, por lo que gran parte de la población se ha quedado sin medios de vida y sufre inseguridad alimentaria.
De acuerdo con el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), más de 7,5 millones de niños en Yemen necesitan asistencia sanitaria urgente y alrededor de 370.000 se encuentran al borde de sufrir desnutrición severa.