MADRID, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
El difunto presidente de Zimbabue Robert Mugabe, que falleció en septiembre, menos de un año después de ser apartado del poder, ha legado a sus herederos 10 millones de dólares y varias propiedades, previsiblemente a repartir entre su última mujer, Grace, y sus tres hijos.
El diario estatal 'The Herald' ha publicado este lunes los extractos de la fortuna de Mugabe, que no estableció en vida ningún reparto específico entre sus herederos. Durante años, las riquezas de quien fuese presidente del país durante tres décadas y de su familia han sido motivo de especulación constante.
La hija de Mugabe, Bona Chikowore, solicitó en octubre a los tribunales registrar el patrimonio, con una lista que incluye 10 millones en efectivo en un banco, cuatro viviendas en Harare, propiedades agrícolas y rurales y diez vehículos. Entre las viviendas figura el palacio bautizado como Blue Roof, residencia del mandatario.
El abogado de la familia, Terrence Hussein, también ha presentado un documento en el que acredita que no se ha podido localizar ningún testamento que plasme las últimas voluntades. Según las leyes zimbabuenses, la ausencia de un testamento implica el reparto de los bienes entre la mujer y los hijos.
El registro difundido por 'The Herald', sin embargo, estaría incompleto, al no incluir al menos una empresa compartida con Grace Mugabe y los activos en el extranjero, según la agencia Reuters. La Embajada de Estados Unidos en Harare estimó en 2001, en un documento divulgado por el portal Wikileaks, que los rumores situaban en más de 1.000 millones de dólares la fortuna del presidente.