MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
El mundo ha perdido 178 millones de hectáreas de bosque desde 1990, según ha revelado un informe elaborado por la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
A pesar de esta cifra, el informe, publicado este martes, destaca que la tasa de pérdida neta de bosque disminuyó sustancialmente durante el período 1990-2010 debido a una reducción en la deforestación en algunos países, además de aumentos en el área forestal en otros a través de la forestación y la expansión natural de los bosques.
Así, en los últimos cinco años, la tasa anual de deforestación se estimó en 10 millones de hectáreas, frente a los 12 millones en 2010-2015 y los 16 millones de hectáreas en 1990-2000.
Además, el trabajo señala que el área de bosque en zonas protegidas ha aumentado en 191 millones desde 1990, y ahora ha alcanzado un estimado de 726 millones.
"Vamos en la dirección correcta, pero en realidad no son buenas noticias porque no estamos yendo hacia esa dirección lo suficientemente rápido", ha detallado el experto de la FAO Anssi Pekkarinen, que ha agregado que se necesitan "fortalecer nuestros esfuerzos para hacer más en menos tiempo".
"Este informe nos muestra que nos llevará 25 años más llegar a la meta de acabar con la deforestación, cuando el mundo se había propuesto hacerlo para 2020", ha lamentado.
Actualmente, África tiene la mayor tasa anual de pérdida neta de bosques de la última década, con 3,9 millones, seguida de América del Sur, con 2,6 millones de hectáreas. Por el contrario, la mayor ganancia neta de área forestal ocurrió en Asia.
Entre los diez principales países del mundo con mayores pérdidas netas anuales promedio de área forestal en la última década se encuentran Brasil, Bolivia y Paraguay, así como República Democrática del Congo, Indonesia, Angola, Tanzania, Myanmar, Camboya y Mozambique.
Los Estados que, en contraste, han mejorado respecto a la deforestación son: China, Australia, India, Chile, Vietnam, Turquía, Estados Unidos, Francia, Italia y Rumania.
Los bosques cumplen un importante papel para la generación de oxígeno y la lucha contra el cambio climático. Nuevos datos recogidos por la agencia de la ONU indican que las emisiones globales de la pérdida de bosques disminuyeron en aproximadamente un tercio desde 1990.
Además, los bosques contienen 60.000 especies de árboles diferentes y en ellos viven el 80 por ciento de las especies de anfibios, el 75 por ciento de las especies de aves y el 68 por ciento de las especies de mamíferos de la Tierra.
Por ello, la FAO ha recordado que es "crucial" cambiar el rumbo de la deforestación y la pérdida de biodiversidad, algo que se puede hacer conservando y gestionando de manera sostenible los bosques y los árboles dentro de un enfoque de paisaje integrado, abordando los desafíos de la silvicultura y la seguridad alimentaria.