NUEVA YORK, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha alertado de que al menos 8.000 personas permanecen atrapadas en la ciudad siria de Raqqa, en el norte del país debido a los enfrentamientos entre las milicias kurdoárabes y Estado Islámico.
En la zona, la ONU calcula que unos 95.000 civiles han tenido que huir de sus casas solo durante la primera semana de octubre a consecuencia de los combates en 60 localidades de las gobernaciones vecinas de Deir Ez Zor, Alepo y Raqqa, según ha publicado ACNUR.
Estas personas tienen la opción de quedarse atrapadas en medio de los combates o huir afrontando un serio riesgo de muerte. La organización ha urgido a permitir a estas personas un paso sin peligro para que puedan alcanzar un lugar seguro, refugio, protección y acceso a los servicios básicos.
ACNUR acoge actualmente a más de 34.000 desplazados internos en Siria, pero alerta de la escasez de recursos como agua, medicina o acceso a electricidad, recursos que a menudo, según los residentes, quedan reservados para los yihadistas.
Casi 270.000 personas han huido de sus hogares en la provincia de Raqqa desde principios de abril. La mayoría de ellos, unos 209.000, siguen desplazados. Sin embargo, unos 40.000 han encontrado refugio en Alepo, 13.000 en Idleb, 6.600 en Deir Ez Zor y 1.400 en Hama.