El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu. - Kobi Gideon/GPO/dpa
MADRID, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha alertado de las supuestas maniobras del Tribunal Penal Internacional (TPI) para evitar que puedan ejercer su "legítimo derecho a la defensa" y ha calificado de "escándalo histórico" que pueda acabar tomando medidas contra funcionarios políticos y militares israelíes por las matanzas en Gaza.
"Este tribunal no tiene autoridad sobre el Estado de Israel", ha zanjado a través de un mensaje que ha publicado en sus redes sociales, en el que ha arremetido contra el TPI por barajar siquiera la posibilidad de acometer todo un "absurdo" y una "distorsión de la justicia y de la historia".
"Ochenta años después del Holocausto, los organismos internacionales que se levantaron para impedir otro Holocausto están considerando negar al Estado judío su derecho a defenderse. ¿Contra quién? Contra aquellos que abiertamente buscan nuestro genocidio", ha dicho.
"Esta será la primera vez que un país democrático, que lucha por su vida según todas las normas del Derecho Internacional, sea acusado de crímenes de guerra", ha enfatizado Netanyahu, quien ha insistido en situar la causa del Gobierno israelí como una cuestión que atañe a toda la humanidad.
Así, ha manifestado que si finalmente el TPI da ese paso, "será una mancha indeleble para toda la humanidad" y "un crimen de odio antisemita sin precedentes".
No obstante, Netanyahu ha advertido de que ninguna decisión, se tome donde se tome, dañará la determinación de Israel de lograr sus objetivos, que pasan por liberar a los rehenes, acabar con Hamás y garantizar que la Franja de Gaza no supondrá una amenaza para Israel nunca más.
Por último, Netanyahu confía en que la comunidad internacional se muestre en contra de esta posible acción del TPI, puesto que supondría un revés para todas las democracias del mundo y espera que utilice "toda su influencia y todos los medios a su disposición para detener este paso peligroso", ha expresado.
Antes de referirse a esta cuestión, de la que también ha hablado en términos parecidos el presidente israelí, Isaac Herzog, Netanyahu ha expresado su determinación de ordenar una operación a gran escala en Rafá "porque no queda otra opción". "Destruiremos allí a todos los batallones de Hamás", ha confiado.