MADRID, (EUROPA PRESS)
El ya ex primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se sentó por equivocación en el escaño reservado al primer ministro en la Knesset o Parlamento israelí, el asiento que había ocupado durante más de doce años, y que desde este domingo corresponde a Naftali Bennett.
Poco después de la votación de investidura de Bennett el domingo, Netanyahu regresó a su asiento tras dar la mano a Bennett, que correspondió el gesto con una palmada en la espalda.
Tras unos segundos en el escaño, fue avisado de que ese ya no es el asiento que le corresponde y él de inmediato se levantó y se dirigió al que le correspondía como líder de la oposición, el ocupado hasta ahora por el líder del partido centrista Yesh Atid, Yair Lapid, que estaba vacío en ese momento.
Lapid es entonces el que queda desubicado y acude raudo a su puesto para retirar la documentación en carpetas que tenía sobre su escritorio. La última de las carpetas se la da el propio Netayahu.
Bennett ha sido elegido este domingo nuevo primer ministro israelí con 60 votos a favor y 59 en contra en la Knesset o Parlamento israelí y pone fin así a doce años de gobierno de Benjamin Netanyahu. Bennett y Lapid encabezan una improbable coalición que incluye a todo el espectro político israelí y que ha propiciado por primera vez en la historia del país el nombramiento de un árabe-isrsaelí como ministro.